El libro no se agota, ni nos agota a los lectores. La palabra y la imagen están ahí para regalarnos no solo historias, sino momentos que disfrutamos en la intimidad o compartiéndolos. En las próximas líneas se incluye una amplia y variada selección de títulos que harán las delicias de pequeños, jóvenes e, incluso, adultos. Se trata de ventanas abiertas a la ensoñación de las historias y propuestas que buscan a los lectores, como parte de esa juego cómplice que representa la lectura en las fechas navideñas o en cualquier momento. 

Sueños y valores

Grande y pequeño, de Henri Meunier y Joanna Concejo, en Thule Ediciones. No es solo la historia tan intensa y extraña que este autor nos trae, sino la forma en la que lo hace, con unas ilustraciones muy adecuadas al contenido. Valores como la fraternidad o la amistad, potenciados por lazos familiares, convierten este cuento en una delicia para grandes y pequeños, siempre que haya ganas de dejar que la imaginación crezca en el lector. 

A paso de tortuga, de Boniface Ofogo y Rebeca Luciani, en Kalandraka Editora. Preciosa adaptación de un cuento africano que nos habla de la sabiduría personificada en algunos animales como la tortuga. Ni el más fuerte ni el más veloz, pero sí el más equilibrado, sobre todo cuando surge un problema entre los animales, y hace falta saber actuar con cabeza. 

El rey cerdo, de Koos Meinderts y Emilio Urberuaga, de Ediciones Ekaré. Una historia divertida y amena que, tras las ilustraciones y la acción de los personajes, plantea temas más serios, como por ejemplo el de la existencia de todos los seres vivos, y el de nuestra condición de carnívoros. Una reflexión para todos los públicos sobre prácticas y costumbres que produce placer a unos y daño a otros. 

Leo y Lisa, de Miguel Ángel Sáez, en Thule Ediciones. Atentos a todos los mensajes que nos llegan con esta historia tan singular y actual, y a los valores como, por ejemplo, la cooperación, la amistad, el trabajo, etcétera, y la ilusión de luchar por los sueños cuando pueden ser factibles. Leo y Lisa -y el resto de personajes- están hechos con materiales reciclados. Con ese punto de partida, este álbum ilustrado envía un mensaje claro: salvemos la tierra, desde el compromiso y la imaginación. 

Dentro de casa, de Nono Granero, en Ediciones Ekaré. Precioso cuento con estructura acumulativa, en el que el autor, con un lenguaje musical y sencillo, nos hace cómplices de las sensaciones y experiencias que le van sucediendo, y que asume con naturalidad, sin malos gestos ni desaprobación. Todo ello se conjura para facilitar una nueva visión de la situación, con tanto animal dentro de su casa autoinvitado, y que conforman un nuevo hogar. 

Zackarina y el lobo de arena, de Asa Lind, en Kalandraka Editora. Con una prosa envolvente y un tono alegre, la autora nos va dejando estas pequeñas historias de una niña y su amistad con el lobo de arena, un amigo ¿imaginario? que llega allí donde los adultos no dan respuesta a los niños. Todas las pequeñas aventuras e inquietudes son compartidas con ese amigo, imaginario o no, pero siempre está ahí, fiel y a la escucha.

Aprender de las palabras

Dinosaurios, de Plumeri & Bloz, en Algar Editorial. Un cómic de lo más divertido e instructivo sobre el mundo de los dinosaurios, sus formas de vida, su paso por la tierra, etcétera, contado con cierto humor por Indino Jones. Un repaso a tipos, especies, costumbres, con la incorporación de los descubrimientos más recientes de cada uno de ellos. Atractivo para niños y niñas. 

El bosque es nuestra casa, de Sara Fernández y Sonir Roig, en A buen paso Editorial. El porqué son tan necesarios libros de este tipo, en cuanto a valores, mensaje y contenido, queda claro por cómo están pasando este calentamiento del planeta. Contando e informando de manera eficaz y amena, se propone un viaje hacia uno de los seres vivos de los que tanto depende nuestra suerte.  

El árbol de la vida: Charles Darwin, de Peter Sís, en Ediciones Ekaré. Un álbum ilustrado que se deja querer desde el primer instante, por lo visual y por la organización de los contenidos, y por lo fascinante de este personaje, del que se traza un itinerario intenso. Con esta ejecución y acabado, bajo este tono informativo pero sin perder el punto de humor, resulta atractivo y cautivador; un regalo para el disfrute personal de los buenos lectores, sin edad. 

El gran libro de las Olimpiadas, de Veruska Motta y Luca Poli, en Algar Editorial. Trazando un itinerario cronológico sobre el origen y evolución de este acontecimiento, la ordenación y disposición de dichos contenidos convierten a este libro en un atractivo acercamiento al significado más profundo del deporte. Un álbum que, en tono divertido, resalta la importancia de los valores de esfuerzo y compañerismo. 

Muchacha en motocicleta, de Amy Novesky y Julie Morstad, en Thule Ediciones. Una aventura que se comparte con valentía, ternura y optimismo, con una prosa sencilla y sugerente, sobre la primera mujer que dio la vuelta al mundo en solitario. Viajar cura muchos males y si esa mirada recoge la belleza y la bondad en cada sitio, pues ese itinerario se vuelve contagioso y lleno de vitalidad. 

La noche de la visita, de Benoit Jacques, en A buen paso Editorial. En torno a Caperucita Roja surge esta divertida versión que pone a prueba la paciencia del lector, con unas ilustraciones cuidadas y en sintonía con los textos, que guardan cierta musicalidad y ritmo. Es una noche bien ambientada, para que el miedo vaya con sus dosis y sus atuendos, pero que el azar o la pericia se pondrán de parte de la parte más débil. 

Literatura infantil y juvenil. CÓRDOBA

Historias sin fin

Las nietas de Baba, de Ina Hristova, en A buen paso Editorial. Esta historia de una abuela con el lobo en la que el ingenio de la primera le pondrá a prueba frente a la ferocidad del segundo. Todo es calma en el bosque, pero cualquier movimiento en falso puede despertar a la fiera. Los colores cálidos que van en las ilustraciones hacen este viaje lector más intenso para los pequeños y los grandes. 

Mucho mucho, de Trish Cooke y Helen Oxenbury, en Ediciones Ekaré. El porqué este libro está tan bien considerado es fácil de entender con su lectura. Con una estructura repetitiva, va aumentando el interés sobre la acción: un bebé al que todos quieren abrazar. No dejan de llegar familiares, hasta que la historia alcanza su punto culmen con la última visita. Un libro para saborear en familia, con los más peques. 

El mundo del revés, de Pablo Aranda, en Edebé Editores. Novela póstuma de Pablo Aranda, que engancha desde el comienzo, y que retrata, con lenguaje actual y visión juvenil, al personaje (Gonza), cuyo universo se ha desequilibrado por la ausencia de una chica (Gema). Con la complejidad de la adolescencia y lo trepidante de la acción que se propone, Aranda nos dejó esta obra en la que debemos detenernos, por su trama, su buen acabado, su ternura y su humor. 

El pequeño manipulador, de Bartosz Sztybor y Maciej Lazowski, en Thule Ediciones. Un libro para la reflexión mientras se disfruta del contenido y de las ilustraciones, pero sin perder de vista el objetivo de esta misiva: abrirnos los ojos ante determinadas situaciones, máxime a los más peques, menos conscientes de la presencia de los pequeños manipuladores y de sus tretas para llevarnos a su terreno. 

Selva, de Marina Gibert, en Kalandraka Editora. Un álbum ilustrado especial, sin una sola palabra, el lenguaje narrativo es el visual. Y a través de este nos vamos sumergiendo en el viaje del protagonista, un viaje vital y enriquecedor, cromático, por una naturaleza que le pondrá al frente de nuevas amistades, de otros vínculos, que ya no desaparecerán, aun cuando regrese a la ciudad, porque todo permanece en la memoria y acaba por aflorar. La autora se alzó con el XIV Premio I. Compostela para álbumes ilustrados. 

La giganta, de Anna Hoglund, en Ediciones Ekaré. Un libro con una historia sencilla pero cautivadora, que no pasa de moda ni de tiempo, y que nos resalta la valentía y la aventura como modo de avanzar ante la adversidad. Se disfruta desde el inicio, con un formato cuidado e ilustraciones acordes, con la decisión de la protagonista de no cejar hasta recuperar al ser querido. 

Te estaré mirando, de Isaac Rosa, Edebé Editores. Una novela juvenil, ensoñadora y tierna, sobre lo devastador de enamorarse en la adolescencia, mostrándonos ese mundo que se genera dentro del protagonista, Dani, sus elucubraciones y pensamientos, y cómo se vuelve empático con el lector desde el principio. Con una prosa cuidada, este alegato sobre la pasión desde la timidez y el respeto.

 Arkane, de Antonio Martín Morales, en Algar Editorial. Una aventura trepidante sobre este personaje que tendrá que crecer rápido, dadas las circunstancias familiares de traiciones en las que se va a ver envuelto, y buscará la manera de vengarse, a costa de luchar contra sus propios sentimientos y sus fines últimos.