La larga amistad entre Jordi Virallonga, protagonista de este libro, y el también poeta José Antonio Jiménez, les llevó a citarse para almorzar a cuenta de un prólogo para la poesía reunida del primero. Del intercambio de preguntas y respuestas nació un primer borrador cuyo potencial se aprovechó para seguir trabajando, puliendo y ampliando hasta acabar dando lugar a un testimonio de primer orden para quien ya conozca la obra de Jordi Virallonga, quien se acerque a ella por vez primera o quien quiera descubrir con qué elementos ha construido este poeta su mirada y cómo la templa o afila para diseccionar sus realidades.

La gestación de Palabras para la resistencia merecía ser contada por la implicación que tiene en uno de los aciertos de este ensayo: el intercambio o desarrollo de ideas se produce con una agilidad poco habitual en el género, atrapando al lector sin renunciar a un milímetro de profundidad.

Conviene advertir que Virallonga, veterano profesor de literatura, cuenta en sus cuatro décadas de trayectoria con más de una veintena de títulos de publicados –entre ellos, algunos poemarios con importantes reconocimientos–, ha sido traducido a varios idiomas y capitaneó durante veinticinco años el Aula de Poesía de Barcelona. Una prolongada inmersión en el magma poético del que ha extraído esta conclusión fundamental para él y su poética: «Los poetas que más me interesan, y a quienes más agradecido estoy son aquellos que no solamente se ocupan de su obra, sino también de sus contemporáneos». José Antonio Jiménez subraya esta característica en el prólogo al catalogar la obra de Virallonga de «épica de la resistencia», una idea que se erige en el eje central desde el que parten las nervaduras de este ensayo. El título y subtítulo: Palabras para la resistencia. Sobre poesía y otras trincheras, no podrían, pues, ser más acertados.

Jiménez observa que esta característica de la obra de Virallonga se debe en parte a un desgaste provocado tras el declive de la euforia inicial de la democracia, «a finales de los 80 y principios de los 90 del pasado siglo, justamente en los años en que el poeta catalán empieza a escribir y a publicar sus primeros libros importantes», y que el paso del tiempo ha ido envolviendo de un aura de firmeza frente al desgaste, de temperamento insobornable (integridad y mirada crítica son una combinación sumamente amenazante en una sociedad adocenada, indiferente ante los mecanismos del poder).

A lo largo de Palabras para la resistencia se recoge la opinión, con los oportunos añadidos o apuntes de Jiménez, de uno de los autores más relevantes de la actualidad sobre diversas cuestiones que atañen a su pensamiento vital y poético. De este modo, el repaso a sus libros emblemáticos: Saberte, Perímetro de un día, El perfil de los pacíficos, Crónicas de usura o Hace triste, se intercala con capítulos sobre la felicidad, la función poética, la verdad y el moralismo o la sobredosis de conciencia.

Pero si hay una idea que retumba en el fondo de las páginas de este ensayo es esta afirmación: «no escribo de espaldas a la aventura del ser humano». Este es el motivo de que haya buscado «ponerse en la conciencia del otro», buscar complicidades con sus congéneres para sentirse «intensamente con los demás», o, como dice en otra ocasión, comprender el estar y no buscar en el ser, pues esa es «la manera más efectiva de intentar averiguar quién eres». Es decir, nada de exploraciones ensimismadas ni confesiones, sino diálogo con el otro para avanzar en el conocimiento de uno mismo. Una poesía, en definitiva, que persigue derribar el pensamiento y reconstruirlo para ofrecer al lector herramientas con las que «se fortalezca en el poder de su intimidad y se aleje de lo que le enseñaron a ser y obedecer».

En esta larga búsqueda el poeta no ha abandonado el profuso diálogo con los maestros vivos y con los muertos, con «la estirpe humana», desde los grecolatinos a la generación del 50, con cuyos miembros mantuvo un vínculo especial. Aunque el avance haya sido, obligatoriamente, más solitario; lejos de las deudas de los círculos y movimientos.

Al fin y al cabo, el premio, afirma, «es el respeto y reconocimiento de tus maestros y compañeros y compañeras de generación». Palabras de toda una vida de dedicación y entrega a la poesía.

Palabras para la resistencia. Sobre otras trincheras

Autores: Jordi Virallonga y José Antonio Jiménez.

Edita: EDA Libros, 2021.