De atracón, un paseo para golosos culturales

No hay épocas oscuras. Lo que pasa es que hay otras muy brillantes cerca o miedo a buscar otras luces. Justo eso pasa en Córdoba con ese periodo que reivindica la macromuestra Cambio de eraen sus tres escenarios: la Sala Vimcorsa, la Mezquita-Catedral y el C3A.

Así que, como son tiempos navideños de atracones, un servidor se dispone a sumergirse toda una mañana en una época remota, en una Córdoba que junto al resto del área mediterránea era otra Córdoba, con la misma curiosidad que un niño se deja fascinar por unos dinosaurios que le reta a imaginar un mismo planeta alternativo.

Nada más salir de casa tengo obviar las muestras que actualmente acoge la Diputación para dirigirme hacia Sala Vimcorsa. Por el camino, en Las Tendillas, veo la animación navideña, que recuerda las cerca de doscientas citas de la programación navideña del Ayuntamiento, muchas de ellas de carácter musical y teatral. La cartelera en el exterior del Teatro Góngora, con la programación de diciembre y enero del IMAE, vuelve a ser un reproche de la mucha oferta cultural en Córdoba y de lo poco que se aprovecha. Al igual que la cercanía del Archivo Histórico Provincial donde hay una muestra histórica de reproducciones de periódicos. No muy lejos la Fundación Gala ofrece una muestra de Marisa Vadillo, el colectivo Algazara expone en el Teatro Cómicoy, algo más apartado, se puede ver en La Corredera, en la sede de Ucocultura, las fotos de Alba Blanco.

'Cambio de era', al detalle

Concentración, Juan. Hay que optar . Así que, ya en Vimcorsa, la primera sala de la muestra Cambio de Era, con lápidas paleocristianas, hipnotiza. Tanto como la propuesta de inmersión en una basílica cristiana, las piezas del tesoro de Torredonjimeno o el anillo del obispo Sansón, hallado en Cercadillas y que permitió interpretar el conjunto. Para flipar. El mapa de la ciudad con la ubicación de donde fueron halladas las piezas de aquella época cambian a cualquier cordobés curioso, que ya nunca más podrá pasear por esos lugares sin dejar de recordar lo que se halló allí mismo.

Otras exposiciones

Camino de la Mezquita-Catedral sigue el sufrimiento de tener que anotar mentalmente en la agenda, en el apartado de tareas pendientes, otras tantas exposiciones: la de la Casa Árabe, la del Centro de Arte Rafael Botí, con una doble exposición, la del Museo de Bellas Artes con otra doble muestra, una de ellas dedicada a dibujos barrocos de artistas italianos o el Museo Arqueológico, que siempre sorprende con novedades. Y aunque no lo haga. Su impresionante puerta de Hernán Ruiz ya es un reclamo en sí mismo para pasar por la plaza de Jerónimo Páez.

Ya en la Mezquita-Catedral, la segunda sede de Cambio de era, seis ejes temáticos acercan a las últimas investigaciones sobre la Córdoba tardoantigua, con muchas aportaciones de Félix Hernández, que tanto descubrió en sus excavaciones en el primer templo cordobés hace un siglo. Hasta tal punto que, ironías de la vida, dicen que le pidieron que terminara sus trabajos por tener todo levantado.

'Naturaleza encendida', en el Alcázar

Por La Ribera, de nuevo hay que apuntar en la agenda visitas pendientes como la del Alcázar y su espectáculo Naturaleza encendida: raíces. Pero ya en el C3A abruma el contraste entre la muestra Cambio de era y las otras exposiciones de arte contemporáneo, como la muestra Futuros Abundantes, de la colección de la familia Thyssen-Bornemisza. Un reto al espectador sobre cómo dialogan formas tan diferentes de concebir el arte. Centrados en la muestra paleocristiana, impresiona el mosaico del Museo del Bardo (Túnez) con una de las primeras representaciones de un ángel, o la evolución de las primeras representaciones cristianas, o el vídeo inmersivo, o una de las más antiguas representaciones de Jesucristo conocidas o... Imposible detallar un menú completo cuando uno se da un festín, aunque sea de cultura y solo haya podido picar un poco.