Tercera semana consecutiva con nivel de alerta 3. Mientras la incidencia acumulada a 14 días se mantiene muy por encima de los 250 casos por cien mil habitantes, que marcan el riesgo extremo (la provincia presenta una tasa de 480,8), el comité provincial de alertas de salud pública de Córdoba se ha vuelto a reunir este miércoles para revisar la evolución epidemiológica de la pandemia y ha determinado mantener una semana más el nivel 3, lo que afecta básicamente a los aforos de los espacios públicos, que seguirán restringidos al menos hasta el jueves próximo en todos los distritos sanitarios de la provincia. Córdoba y Málaga son las únicas provincias que se encuentran en nivel de alerta 3 en este momento, ambas en todo su territorio. El resto se encuentran en nivel 2 salvo el municipio sevillano de Peñaflor, que depende del distrito sanitario Guadalquivir de Córdoba y se encuentra en nivel 3.

Asimismo, no se ha decretado el toque de queda de 2 a 7 de la mañana en ningún municipio de la provincia, ya que aunque hay ocho municipios con la tasa descontrolada con más de 1.000 casos por cien mil habitantes, ninguno tiene una población superior a las 5.000 personas, por lo que no cumple los requisitos fijados por la Consejería de Salud para implantar esta medida. En esta situación se encuentra Doña Mencía (1.408,5), Fuente Tójar (1.051,1), Luque (1.041,7), Palenciana (1.160,4), Santaella (1.148,7), Belalcázar (1.020,1), Pedroche (2.564,1), Villanueva del Rey (1.182,3).

Por su parte, los comités de alerta de otras provincias han pedido el toque de queda para los municipios de Benalup y Casas Viejas de Cádiz, Bonares y Trigueros de Huelva, Bailén y Mengíbar de Jaén y Villaverde del Río, Tocina y El Cuervo de Sevilla de la provincia de Sevilla, aunque no entrará en vigor en ningún caso mientras que el TSJA no ratifique la medida.

Restricciones en Córdoba.

Restricciones en Córdoba. CÓRDOBA

Los umbrales que marcan los niveles tienen en cuenta ocho indicadores. No solo la incidencia acumulada a 14 días sino la de 7 días y la incidencia en mayores de 65 años, además de las pruebas diagnósticas, los porcentajes de trazabilidad de los contagios, el índice de hospitalización y de ocupación de camas uci, así como la cobertura de vacunación.