Los empresarios del ocio nocturno de Córdoba no creen que la implantación de un pasaporte covid para entrar a sus locales tuviera algún sentido "si no va acompañada de una recuperación de horarios y aforos". Es su respuesta al rechazo del TSJA a la medida recogida en la Orden del 5 de agosto consistente en limitar el acceso al interior de los establecimientos de esparcimiento y de hostelería con música a aquellas personas que puedan acreditar estar en posesión del certificado covid o acreditación de PCR o test de antígenos negativo en las últimas 72 horas.

Según Rubén Rivero, representante del sector y gerente del Grupo Góngora, "el pasaporte covid es lo único que nos queda para poder recuperar los interiores y plantearnos volver a la actividad, pero solo si volvemos a los horarios normales, si tenemos que cerrar a las 2 de la madrugada, es inviable".

Salvo contadas excepciones en la zona de la Ribera, las discotecas y pubs de Córdoba permanecen cerrados desde hace 17 meses y no ven claro cuándo podrán reactivar sus negocios. "Se suponía que en verano la cosa cambiaría, pero seguimos igual o peor porque a pesar de la vacunación, sigue habiendo muchos contagios y no cambian las restricciones". La semana pasada, Córdoba subió al nivel de alarma 3 y esta semana se ha prorrogado la medida, con la restricción de aforos que esto supone.

Según Rivero, la situación demuestra que "las discotecas y el ocio nocturno no son un problema sino una solución porque ofrecemos muchas medidas de seguridad, ya que está claro que el virus se está propagando porque a las dos de la mañana nadie se va a su casa, sino que la gente se mete en casas, se va a los parques, a chalets o parcelas sin ningún tipo de control". En este sentido, consideran que la tarjeta covid suponía una esperanza, "ya que permitiría a los usuarios entrar en los locales con un plus de seguridad y a los empresarios abrir los negocios de nuevo". Mientras tanto, "¿quién se va a plantear abrir?", se pregunta Rubén, "es desesperante, esto no parece tener fin".