Tradiciones
San Sebastián de los Ballesteros saborea el guiso de pavo con fideos en las fiestas de su patrón
Entre el fervor a su plato y a su patrón, San Sebastián, en este pueblo de alemanes de la campiña cordobesa con nombre de santo todavía se pueden percibir y apreciar los rasgos físicos germánicos: rubios de piel muy blanca y ojos claros de los vecinos que le hace especial y diferente de los pueblos colindantes.

San Sebastián de los Ballesteros degusta el tradicional pavo con fideos / José Antonio Aguilar
San Sebastián de los Ballesteros ha venerado a su patrón este domingo entre tradición, devoción y gastronomía con el tradicional guiso de pavo con fideos. Todo un éxito en la programación de un día grande en el que la climatología ha acompañado.
Como manda la tradición, la imagen ha salido en procesión a los sones de la Banda de Cornetas y Tambores de Santaella, que ha clamado al cielo marcando el ritmo de los portadores y, entre el recogimiento, se han ofrecido escenas singulares por el recorrido, jalonando vivas y piropos al titular. Es costumbre, entre otras cosas, lanzar peladillas para que las bendiga y traigan suerte durante el año.
Seguidamente, el polideportivo municipal, epicentro y escenario de la jornada, se ha convertido en un gigantesco comedor con la compañía de la corporación municipal al completo, encabezada por el alcalde Francisco Javier Maestre Ansio, y con la asistencia del delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía, Adolfo Molina; el vicepresidente de la Diputación de Córdoba, Andrés Lorite; el delegado de Agricultura de la Junta de Andalucía, Francisco Acosta; alcaldes y concejales de municipios vecinos; y casi un millar de personas.
Atraídos por el legado gastronómico-cultural, han degustado el plato de olla y cuchara, cimentado en ingredientes ancestrales, la combinación de sabores, aromas y texturas primarias, un símbolo culinario saludable que recompone cuerpo y alma, con toneladas de paciencia en la cocción, la riqueza de los ingredientes como el pavo, del que se han utilizado 100 kilogramos, con 25 kilos de fideos realizados en las vísperas artesanalmente en la panadería local, todo ello elaborado con el aceite de oliva virgen extra de la Cooperativa Olivarera Local, la creatividad y el esmero de la buena mano de Joaquín Sag, quien transformó el guiso humilde en un verdadero triunfo de sabor sin perder la esencia de las raíces centro-europeas.
El guiso ha sido presentado en elegantes cuencos de barro cromado, diseño del taller Ivanros de La Rambla. Nunca un plato fue mejor dignificado. Al final siempre milagrosamente hay un lugar para el postre, la variedad y surtido de dulces elaborados por manos artesanas que la hermandad de Nuestra Señora Virgen de los Dolores venden para sufragar los gastos de la misma, un festín que también ha sumado la actuación del artista José Ortiz y la Orquesta Milenium ha puesto el broche final. El edil Francisco Javier Maestre ha querido hacer extensiva su gratitud a todos y ha manifestado el rotundo éxito que ha servido para reforzar el patrimonio intangible cultural y gastronómico que ayuda a potenciar el turismo local.
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