Provincia

Los ingenieros avisan de que limpiar La Colada obliga a vaciar el embalse

El Colegio Oficial aclara que los dragados sólo se pueden efectuar en balsas de menor profundidad; el embalse de El Viso tiene un calado actual que supera los 40 metros de altura

Limpieza del canal del Genil-Cabra en marzo del año pasado, con el cauce vacío.

Limpieza del canal del Genil-Cabra en marzo del año pasado, con el cauce vacío. / Virginia Requena

Rafael Verdú

Rafael Verdú

Limpiar un pantano grande, e incluso uno de tamaño mediano, no es una tarea fácil. La medida reclamada el pasado martes por el presidente de la Diputación Provincial, Salvador Fuentes, para limpiar el vaso del pantano de La Colada -cuyas aguas están muy contaminadas- podría suponer todo un reto de ingeniería que se antoja muy difícil de llevar a cabo en las condiciones actuales. 

Tras conocer la petición de Fuentes, este periódico se ha puesto en contacto con el Colegio de Ingenieros de Caminos, Caminos y Puertos -especialistas en obras hidráulicas- para conocer qué supone limpiar el vaso de La Colada. Técnicamente, aseguran desde la institución, no es posible efectuar un dragado de un embalse de estas características, con un calado que ahora mismo supera los 40 metros de altura. No existe maquinaria para efectuar una limpieza del fondo en estas condiciones.

Fuentes del Colegio han indicado que la única solución para efectuar una limpieza completa del pantano de La Colada sería vaciarlo por completo y después introducir la maquinaria pesada. Antes, sería necesario hacer estudios de batimetría -el análisis del fondo- para conocer qué altura tienen los sedimentos depositados en la base del pantano, en el caso de que no se hayan hecho aún. 

En el pantano de Cordobilla

En el pantano de Cordobilla se llevó a cabo una actuación similar, pero ese embalse no tiene nada que ver con La Colada. Es mucho más pequeño y prácticamente se había secado. Además, los sedimentos se habían acumulado hasta el punto de haber reducido notablemente su capacidad real. 

«La única manera de limpiar La Colada es vaciarlo. Después se mete maquinaria y se limpian los residuos que haya debajo», indican desde el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos. El dragado solo sería posible, y así es como suele hacerse, en las orillas o bien en ríos o embalses de escasa profundidad.

Vaciar un embalse como La Colada puede resultar relativamente sencillo -solo hay que mantener abiertas las compuertas-, pero volverlo a llenar es harina de otro costal. Se pueden tardar años con un cauce como el del Guadamatilla para alimentarlo. Cuando se terminaron las obras de La Colada allá por el año 2006, hicieron falta cuatro años para ver el embalse a plena capacidad. 

Alegaciones de El Viso

Por otro lado, el Ayuntamiento de El Viso ha presentado alegaciones ante la Confederación Hidrográfica del Guadiana por la concesión de agua para el trasvase La Colada-Sierra Boyera. Su alcalde, Juan Díaz (PSOE), considera ahora que estas obras son «innecesarias», según consta en el documento de alegaciones, y que el dinero previsto para la conexión se debería destinar a mejorar la depuración de aguas en la comarca. Díaz ha reconocido a este medio que «posiblemente habría que haber presentado las alegaciones antes», cuando la Junta abrió el plazo de exposición pública hace un año. 

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents