Desaparecida en marzo del 2008
La Guardia Civil busca a Ángeles Zurera en Monturque junto a una antigua depuradora
El Instituto Armado investiga tras recibir una información que ubicaría su paradero

A. J. González
Agentes de la Guardia Civil han rastreando este viernes una nueva zona en Monturque, en torno a una antigua depuradora, en busca del cuerpo de Ángeles Zurera, la mujer que desapareció de su domicilio de Aguilar de la Frontera el día 2 de marzo del año 2008.
Según han confirmado a este periódico, el Instituto Armado ha recibido una información que indicaba que los restos de Angelines podrían estar en dicho lugar, ante lo cual se ha puesto en marcha el operativo, "sin descartar ninguna posiblidad", apuntan las fuentes de la Guardia Civil consultadas por este periódico.
En concreto, según ha podido confirmar Diario CÓRDOBA, desde primera hora de la mañana de este viernes, un equipo técnico de dos personas han rastreado con un georradar un espacio hormigonado que parece ser una antigua depuradora, situada junto a un olivar y un pequeño polígono industrial a las afueras de Monturque, y algunos metros alrededor del citado recinto. En torno a las 12.00 horas se han dado por concluidos los trabajos y tanto los técnicos de rastreo como los efectivos de la Guardia Civil y la Policía Cientifica presentes en los trabajos han abandonado el lugar.

Venció al miedo, a la ansiedad y a la depresión, Ángeles Zurera volvía a sonreír. / CÓRDOBA
Luis Avial, director técnico de Cóndor Georadar, ha explicado a este periódico que la recogida de datos ha sido "muy exhaustiva" y se ha desarrollado en las zonas que los investigadores "consideran de interés". Se trata de un terreno fundamentalmente "de relleno, con restos de obra y escombros". Avial ha apuntado que tardarán una semana en analizar la información obtenida con el georradar, que podría arrojar luz para determinar si existen restos humanos en el lugar. Asimismo, a preguntas de este periódico el experto se ha mostrado "optimista" ante los posibles resultados, sin aventurar nada, pero ha indicado que "cuando la investigación es buena se saca mucho partido y en este caso el trabajo es excelente".
Además, Luis Avial ha señalado que personalmente se siente "muy implicado" con este caso porque no es la primera vez que presta sus servicios en él y que conoce a la familia a la que le tiene un gran afecto. Sobre los resultados de los trabajos realizados en Monturque, indica el técnico que en estos momentos los trabajos se encuentran en la fase de "toma de datos", sobre lo que ha apuntado que se han extraido "unos datos muy buenos", pero que se han puesto a disposición de la Policía Judicial para que proceda a su análisis.
Sobre esta nueva etapa de la investigación, el hermano de Ángeles, Antonio Zurera, ha mostrado cierto malestar por no haber sido informado del lugar donde se llevaría a cabo la búsqueda, aunque también indicó que «lo más importante» es que «haya una investigación abierta y por el coste de ésta, me hace pensar que la Guardia Civil debe tener indicios importantes» para hacer ese tipo de trabajos con georradar y drones, informa Gema Albornoz.
Una historia escabrosa
La de Ángeles Zurera, vecina de Aguilar, es una historia escabrosa de maltrato y violencia de género. Tres meses después de desaparecer (2008), llegó la sentencia de su divorcio. Doce días antes, su exmarido había sido condenado a seis meses de prisión por violencia de género, tras propinarle una paliza. Antonio, su hermano, no olvida las primeras conversaciones con los agentes de la Guardia Civil: "¿Qué motivo tendría tu hermana para desaparecer si ahora es cuanto estaba empezando a ser feliz?". Desde entonces, está "convencido de que está sin vida desde el 2 de marzo".

Un cámara toma imágenes de la zona en la que se ha buscado a Ángeles Zurera. / A. J. González
Se supo que salió de casa con lo puesto, en la madrugada de aquel día, tras mantener una corta conversación de móvil con su exmarido, que la llamaba insistentemente desde hacía doce días. Ángeles salió pasadas las 1.00 horas sin gafas, ni documentación, ni llaves, ni más ropa. Sus dos hijos se quedaron en casa.
Aquella noche, el exmarido, que vivía, por entonces, en Montilla, se encontraba en Aguilar. Aquella llamada es la última pista que se tuvo de ella, aunque días después se viera a su exmarido con una excavadora en unos terrenos de la localidad. Trabajaba con estas máquinas. "Se sabe quién ha sido", señala Antonio, quien recuerda los "muchísimos indicios que hay sobre la mesa". Ahora, su única esperanza es hallar el cuerpo. A finales de 2022, se realizó hasta hoy la última búsqueda, con drones. Resultó, una vez más, infructuosa.
- Tres heridos en un accidente múltiple en la A-4 a la altura de Montoro
- Dos heridos graves en Baena al volcar un vehículo donde iban nueve personas
- Empresarios de Palma del Río denuncian la «situación de inseguridad» en el municipio
- La isla de un pueblo de Córdoba: un sorprendente lugar lleno de tesoros
- Un conductor se sale de la carretera en Cabra y cae con su coche desde cuatro metros de altura
- Silos de grano, gigantes entre los trigales de Córdoba
- Un detenido tras el desmantelamiento en Puente Genil de un punto de menudeo de drogas
- ¿Y si el puente romano de un pueblo de Córdoba no fuera romano?