El embalse de Sierra Boyera, a los pies de Peñarroya-Pueblonuevo en el valle del Guadiato -y sobre el río del mismo nombre- no lo tiene fácil para recuperarse a base de lluvias. Con la pluviometría media actual de la comarca, unos 450 litros por metro cuadrado en un año normal, el pantano no se recuperaría en el próximo ejerccio hidrológico lo suficiente como para volver a abastecer a los habitantes del norte cordobés.
El jefe del servcio de Producción de la empresa de la Diputación Emproacsa, Gabriel Benítez, ha explicado cuánta agua de lluvia se necesita para devolver Sierra Boyera a una situación de normalidad. Es mucha más de la que cae: se necesitarían 600 litros por metro cuadrado en un año en la zona, un tercio más de la media. Otra opción serían dos semanas de lluvias intensas seguidas que dejaran unos 250 litros por metro cuadrado. "Con eso creo que empezaríamos a verle la punta", ha dicho Benítez.
Sierra Boyera en la actualidad
Ahora mismo Sierra Boyera está totalmente seco, una situación a la que se llegó en la primavera pasada debido a la sequía que ya perdura varios años. El embalse del que beben los habitantes del Guadiato y Los Pedroches se ha llenado un puñado de veces en las tres décadas pasadas, pero de la última hace ya un lustro. Fue en mayo de 2018 cuando se vio la presa esa situación.
Mientras Sierra Boyera no se recupere, el agua para la zona tiene que proceder del trasvase de La Colada, a casi 40 kilómetros de distancia, que ahora mismo se realiza con una conexión provisional que realizó la Confederación Hidrográfica del Guadiana a principios de este año. En cinco meses se ha logrado mover cinco hectómetros cúbicos del líquido elemento, suficiente para ambas comarcas, que suelen gastar unos 7 u 8 hectómetros al año en condiciones normales.
El coste del trasvase del agua
Los problemas del trasvase desde La Colada son varios. El primero y más importante es que el agua está tan contaminada que sólo vale para la higiene personal, la limpieza, la industria o el riego, pero no para el consumo humano ni para cocinar. Para garantizar el abastecimiento hay que recurrir a camiones cisterna.
El segundo problema es el elevado coste del combustible para las estaciones de bombeo, que alcanza 6.000 euros diarios de media, unos 2 millones de euros al año. La Diputación ya solicitó permiso al Ministerio de Transición Ecológica para realizar una conexión a una red de media tensión que pasa por el embalse de La Colada, de modo que las bombras pudieran obtener energía de la red convencional. Según el presidente de la Diputación, Salvador Fuentes, nunca se ha recibido respuesta.