La localidad cordobesa de Almedinilla recupera poco a poco la normalidad tras la impactante tormenta de agua y granizo del viernes, que provocó a su vez el desbordamiento del río Caicena. Se da la circunstancia, además, de que el pueblo de la Subbética celebraba su Feria Real del 13 al 17 septiembre, por lo que la cita se ha visto marcada por las inclemencias meteorológicas y por el desbordamiento del río a su paso por el término municipal. Esta mañana, el agua llegaba ya a todas las aldeas a excepción de Sileras, y está previsto que se celebren las actividades de feria que había programadas. "La feria sigue adelante; estamos haciendo encaje de bolillo para que pueda celebrarse", reconoce el alcalde, Jaime Castillo.
La tormenta provocó el desbordamiento del río Caicena, dejando el nacimiento del manantial del que se abastece esta población inundado de lodo y, por lo tanto, sin agua a todos los vecinos y vecinas de dichas localidades. También se vieron afectadas la aldea de Los Ríos, y las viviendas y fincas más cercanas al Caicena, así como el Museo Histórico Arqueológico de Almedinilla, de donde los vecinos tuvieron que achicar aguas.
Ante esta situación, y aunque la localidad no forma parte de los municipios adscritos al servicio supramunicipal del ciclo integral del agua a los que presta servicio la Diputación de Córdoba a través de Emproacsa, la empresa provincial está colaborando en el desarrollo de estas labores. El presidente de la Diputación de Córdoba, Salvador Fuentes, visitó el viernes Almedinilla y Priego de Córdoba, para conocer la situación de primera mano. Desde entonces operarios de la Empresa Provincial de Aguas (Emproacsa) y bomberos del parque de Priego de Córdoba, pertenecientes al consorcio provincial, están colaborando en la limpieza y el restablecimiento del abastecimiento y saneamiento. El resto de equipos de Emproacsa y Bomberos se encuentra en alerta por si hay que actuar en cualquier punto de la provincia, informa la Diputación.
Localizada una de las dos averías
El alcalde de Almedinilla, Jaime Castillo (PSOE), confía en que el suministro se recupere en las próximas horas del sábado en todas las aldeas, incluida Sileras, y que el agua llegue ya sin turbidez a media tarde de hoy a todos los hogares. De hecho, en muchas casas no se ha visto interrumpido en ningún momento el suministro, pero el agua salía de los grifos con barro. "El problema es que los cuatro bombas de agua habían quedado enterradas en fango", explica el aldalde.
Castillo comenta que ya ha sido detectada una de las dos averías que produjo en la conducción general el desbordamiento del río, situada en el tramo que va de Almedinilla a la aldea de Sileras, y que había quedado tapado por la avalancha de lodo. En concreto, la fuga se encuentra acotada en un tramo de 1,8 km de diámetro 90. El tramo discurre en el borde del arroyo el cual se encuentra con 40 centímentros de profundidad de barro.
Por último, el alcalde apunta que un problema al que habrá que hacer frente más adelante, cuando se solucione lo más urgente, es el provocado por la tormenta en el nacimiento del manantial del Caicena, que "se ha movido de sitio",