proyectos de recuperación en tres yacimientos arqueológicos

Los últimos hallazgos en la villa del Mitra de Cabra obligan a realizar un plan director

El documento determinará la ubicación de cinco mosaicos y contemplará un centro de interpretación | El complejo palacial fortificado del Cerro de la Merced será visitable en los próximos meses

El arqueólogo Antonio Moreno, junto a la reproducción del gran mosaico donde se representa a Dionisos triunfante en un carro.

El arqueólogo Antonio Moreno, junto a la reproducción del gran mosaico donde se representa a Dionisos triunfante en un carro. / MORENO

La reciente finalización del proyecto de consolidación y restauración de las estructuras arqueológicas realizado en el yacimiento arqueológico de la villa romana del Mitra, en cuyo desarrollo tuvo lugar el hallazgo de unas zonas termales, una estancia aún sin clasificar, y del mitreo -espacio de culto al dios Mithras Tauroktonos-, que ha hecho que Cabra sea un referente mundial, comienza a notarse en estas semanas por el interés mostrado, no solo por aquellos ciudadanos que ya han expresado su deseo de visitar este enclave, sino también por varios especialistas e investigadores de distintas universidades españolas y europeas.

Y es que el yacimiento egabrense ocupa una posición muy destacada en la arqueología peninsular por ser uno de los tres lugares que en España y Portugal cuentan con ese tipo de templos y es el único en el que está asociada esa zona de culto con la escultura del dios Mitra en un mismo espacio.

Yacimiento del Cerro de la Merced.

Yacimiento del Cerro de la Merced. / MORENO

Esa consolidación y restauración de los muros originales no solo ha quedado ahí, sino que ha estado acompañada de la instalación en sus respectivas estancias de las reproducciones en lona microperforada de los cinco grandes mosaicos que desde hace años se pueden contemplar en el Museo Arqueológico Municipal, además de por la reposición de las ocho columnas del estanque con fuste de piedra rojiza de Cabra.

Todo ello ha hecho que se tenga que continuar trabajando desde el Consistorio, como ha señalado el director del Museo Arqueológico Municipal, Antonio Moreno, no solo por tener que realizar la restauración de los nuevos hallazgos, sino también por tener que dar un paso más, confeccionando un plan director para el yacimiento con el fin de preservarlo y ponerlo definitivamente en valor.

Un documento este que deberá ir acompañado de dotación presupuestaria suficiente y cuyo desarrollo será a lo largo de varios años, pues en él se tendrá que estudiar y ver la viabilidad de ubicar en el mismo los cinco grandes mosaicos que actualmente se pueden ver en el museo egabrense junto a la instalación en ese caso de sus respectivas cubiertas para su protección, la creación un centro de interpretación, si fuese necesario, y la dotación de una zona para aparcamiento de vehículos.

Vista aérea del yacimiento de la villa del Mitra.

Vista aérea del yacimiento de la villa del Mitra. / F.J. ARROYO SÁNCHEZ

Pero el trabajo de puesta en valor del patrimonio arqueológico egabrense no solo se queda en esta villa del siglo III, que está declarada como Bien de Interés Cultural (BIC) y donde, junto a la mencionada escultura del dios Mitra, se hallaron en 1952 otras como el Niño con Liebre, una imagen del dios Dyonisos y un pequeño Eros dormido junto a los cinco grandes mosaicos mencionados, sino que también actualmente se vienen realizando labores en otros dos yacimientos.

Por un lado, se actúa en el yacimiento del Cerro de la Merced, lo que, tras la conclusión de las labores que para su accesibilidad están realizándose, permitirá en los próximos meses cursar visitas guiadas a este complejo palacial fortificado de época ibérica del siglo V a.C., donde continúan las investigaciones que desde la primera campaña arqueológica del verano de 2012, impulsada por el Consistorio egabrense, están bajo la dirección de Fernando Quesada, catedrático de Arqueología de la Universidad Autónoma de Madrid. Y, por otro lado, en el yacimiento de La Beleña, una necrópolis de estructuras funerarias colectivas, cuya datación se halla entre los años 3300 y 2850 a.C. y donde ha realizado varias campañas un equipo de investigación de la Universidad de La Laguna (Canarias), que permitieron el hallazgo de un ídolo-placa funerario de unos 5.300 años de antigüedad.

Suscríbete para seguir leyendo