Entramos en una época de cambios evidentes de las temperaturas. El otoño avanza y, mientras, el invierno está en el horizonte para despertar ya con la pandemia prácticamente vencida esas ganas de salir de excursión, de visitar lugares con encanto. La provincia de Córdoba cuenta con una ventaja que pocas provincias de interior tienen en España, porque en Andalucía es de sobra conocida la amplia y diversa oferta que atesora para dejar a turistas y visitantes con la boca abierta. 

Aparte de atractivos turísticos de la categoría extraordinaria de la Mezquita-Catedral, su casco histórico, los Patios y el Conjunto Arqueológico de Medina Azahara, la provincia de Córdoba tiene recursos para ser ese territorio en el que cualquier persona, incluidos los propios cordobeses, vivan una experiencia mágica, enriquecedora y envolvente. 

Si nos planteamos hacer alguna ruta por los 76 pueblos que integran la provincia cordobesa, apostar por conocer sus recursos naturales garantiza ese acercamiento de norte a sur y de este a oeste. Más de 380.000 hectáreas ocupan la llamada Red Natura 2000, a la que pertenecen parques naturales como el de la Sierra de Cardeña y Montoro, el de Hornachuelos o las Sierras Subbéticas. A ello hay que sumar parajes de gran valor como las Lagunas del Sur de Córdoba, las reservas naturales de la laguna Amarga, la de Tíscar, la del Rincón, la de Zoñar, la de los Jarales y la del Salobral. 

La riqueza natural de Córdoba es un gran atractivo para el turismo

A su paso por el río Guadalquivir y en un entorno paisajístico como el de Sierra Morena, es posible ver especies protegidas como el águila imperial ibérica o el lince ibérico. Un privilegio que se suma al del olor a romero o jara que envuelven en primavera a cualquier persona. De igual modo, en plena Sierra de Adamuz, el otoño nos brinda un espectáculo como el de la berrea del ciervo como regalo de la naturaleza, al que también se suma la época de la montanera.    

Otro de los sugerentes destinos en la provincia de Córdoba dentro del panorama natural son las cuevas. Algunas de ellas están declaradas Bien de Interés Cultural (BIC), como la Cueva de los Murciélagos ubicada en Zuheros y que tiene una fama abrumadora. También en la Subbética se encuentra la Cueva del Ángel, concretamente en Lucena. Y en la comarca del Guadajoz-Campiña Este se encuentra la Cueva del Yeso de Baena, destacada y famosa por su extraordinaria formación geológica. 

La gran pregunta por responder es cómo poder llegar hasta ellos. Y esa respuesta también esconde hallazgos por descubrir. Solo los senderos que cruzan cada rincón de la provincia de Córdoba y las vías verdes trazan un camino maravilloso que incluso ayuda a vivir la experiencia de la riqueza natural de Córdoba con mayor intensidad. La confluencia de naturaleza, sentimientos, culturas, tradiciones y turismo es un valor añadido que la provincia de Córdoba tiene asegurado en su conocida como ruta mozárabe. A través de paseos o caminos por cuatro zonas de nuestro territorio (Subbética, Guadajoz, Sierra Morena cordobesa y Los Pedroches) el turista puede sumergirse en el fomento del conocimiento de los valores naturales y culturales que tiene Córdoba. Esa ruta puede empezar en Baena, pasar por Castro del Río, Córdoba, Cerro Muriano y muchos puntos geográficos hasta llegar a Monterrubio de la Serena si se hace desde Granada. En cambio, si se inicia desde Málaga, se entra en Cuevas Bajas y se termina en Baena, justo donde coincidiría con el recorrido de Granada. La ruta mozárabe es también conocida por ser ese camino perfecto para quienes quieran desconectar del elevado ritmo de vida que impone la sociedad en nuestros días. 

Córdoba cuenta con siete denominaciones que protegen su gastronomía

Para recargar las pilas tras una ruta de un número determinado de kilómetros, no hay nada mejor que degustar los mejores jamones ibéricos de bellota. Aunque antes le aguarda una visita a municipios con encanto como Hinojosa del Duque, Alcaracejos, Pozoblanco, Villanueva de Córdoba, Cardeña o Conquista. En estos pueblos el visitante puede acercarse al ecosistema y a los usos de una dehesa. Allí, los cerdos ibéricos se alimentan libremente de bellota y pastos cuando están en la montanera. Así, a la hora de degustar un jamón ibérico de bellota se hace notar el sabor dulce que le caracteriza. Para completar esta propuesta en torno a uno de los grandes productos de nuestra tierra, es muy recomendable tener la oportunidad de conocer una fábrica de ibéricos para probar los productos autóctonos. Hay algunas que ofrecen visitas guiadas por sus empresas para conocer el proceso de elaboración de las preciadas piezas y demostraciones de corte de jamón que después, en la ineludible visita a la tienda, puede probar para deleitar al paladar, ya que no hemos de olvidar que los jamones de la zona cuentan con la DOP de Los Pedroches.

Para continuar con nuestro viaje fascinante por la provincia de Córdoba nos espera la Campiña Sur, comarca que se distingue por sus vinos singulares y genuinos. Cuenta con la Denominación de Origen Protegida Montilla-Moriles y, dentro de su exquisita propuesta, incluye visitas a bodegas y otros alojamientos que tienen vinculación con el mundo vinícola, así como vinotecas, restaurantes que dan mucho protagonismo al vino dentro de sus cocinas, museos del vino propiamente dicho, empresas y organismos que se dedican a ofertar rutas entorno al turismo del vino. 

Gracias a la calidad de los vinos de la DOP Montilla-Moriles, la provincia es conocida por los numerosos premios que recibe su Pedro Ximénez y otros caldos que alcanzan su graduación de manera natural. En total son unas veinte las bodegas que incluyen en su oferta visitas guiadas por las tiendas, catas y maridajes que están acompañados de platos regionales. 

La naturaleza extendida por todo el territorio de la provincia de Córdoba invita a todos los amantes del turismo de interior a la práctica de deportes como el ciclismo, la hípica y la caza. Precisamente, tal y como se remarcó en la última edición de Intercaza, la actividad cinegética en Córdoba es el tercer deporte con mayor número de licencias por detrás del fútbol y el baloncesto.

La berrea del ciervo o la montanera son reclamos en los meses de otoño

En el entorno de la comarca de Los Pedroches existe una ruta de 17 kilómetros conocida por muy pocos grupos de personas. Se trata de la ruta de El Despeñadero. Al estar llena de arroyos, se recomienda visitar en épocas como la actual o en invierno -cuando más llueve-, pero la ruta en sí misma tiene todos los ingredientes que busca el amante de la actividad cinegética. Especies como la paloma torcaz, el conejo, la liebre, la perdiz, el jabalí, el milano y el águila perdicera son abundantes en este bello lugar de Córdoba.

La diversidad es tan amplia que la tradición podía pasar desapercibida. Pero no es el caso de nuestra provincia. 

La Semana Santa mueve a miles de personas cada año atraídas por una mezcla de factores que combina la historia, el patrimonio artístico, la gastronomía, la artesanía, la naturaleza y el mundo de las tradiciones. De hecho, hay cinco municipios cordobeses integrados en la Ruta Caminos de Pasión. Son Baena, Cabra, Lucena, Priego de Córdoba y Puente Genil. Todos ellos comparten que entre sí hay pocos kilómetros de distancia como para desplazarse de uno a otro en coche, moto, autocaravana y hasta en bicicleta gracias a la Vía Verde del Aceite, que pasa por estos pueblos. 

Escuchar el tambor de Baena, descubrir el rico patrimonio que tiene la Semana Santa egabrense, el arte de la santería único de Lucena, la joya del barroco que supone Priego y la singularidad de la Mananta pontana garantizan al visitante un sinfín de vivencias y momentos que llevan a muchos de los turistas a repetir su visita.

La Semana Santa atrae el turismo a muchos municipios de la provincia

La provincia de Córdoba reúne todos los requisitos que más demanda despiertan entre los turistas. Sus características la convierten en un lugar que gracias a sus recursos patrimoniales, culturales, gastronómicos y naturales es capaz de atrapar al visitante hasta enamorarle lo que tiene a su alrededor. Disfrutar poniendo los cinco sentidos de una ruta planificada o improvisada por sus pueblos, sus calles o plazas está al alcance de quien marca una fecha de su calendario en rojo para visitar nuestra provincia.

Patrimonio de la Humanidad

Sus ocho declaraciones de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, sus siete denominaciones de origen, su extraordinaria propuesta para el turismo de naturaleza, a través de tres parques naturales y sus vías verdes, o sus ocho embalses navegables convierten a Córdoba, a través de sus pueblos, en un destino inigualable.

Algo que se puede superar por sí solo. Basta con mirar al cielo en algún punto que cuente con el distintivo Starlight - tres en la provincia de Córdoba-. 

Los amantes del turismo de museos tienen más de cuarenta espacios que visitar, a los que sumar unos 2.300 yacimientos arqueológicos inventariados. Razones y reclamos que ofrece la provincia de Córdoba para que el turismo sea un motor de la economía los doce meses del año, incluido el verano. Desde este pasado verano, la playa de La Breña, en Almodóvar del Río, ha entrado en el listado de playas andaluzas con bandera azul, distintivo que concede la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac) que certifica la calidad y la sostenibilidad desde el punto de vista medioambiental de la costa andaluza. En este caso, la playa de interior del pantano de La Breña es la primera en la provincia de Córdoba en obtener este reconocimiento. Con estos tesoros, Córdoba puede presumir además de contar con ciudadanos, tejido empresarial, especialistas y colectivos que con su esfuerzo, su trabajo, pasión e ilusión, que cada día demuestran el rol imprescindible que juegan a favor del desarrollo y el progreso del sector turístico de la provincia. El reto permanente es el de mantener la calidad para alcanzar la excelencia.