La 11º Feria de los Municipios de Córdoba pasará a la historia como la del reencuentro, ya que tras dos años de restricciones por la pandemia, por fin se ha podido celebrar sin miedo a las aglomeraciones, lo que ha movilizado a miles de personas de la provincia y de otros puntos de Andalucía. Según los datos facilitados por la Diputación de Córdoba, más de 45.000 personas han pasado por la explanada del Palacio de la Merced para conocer los estands instalados en la carpa y participar en el centenar de actividades desarrolladas desde el jueves hasta este domingo, fecha de clausura.

En total, se han instalado 114 expositores que, junto a los talleres, catas y degustaciones, han permitido dar a conocer a los visitantes lo mejor de la gastronomía, el patrimonio, la cultura y el turismo de la provincia.

Miles de personas han acudido a la jornada de clausura, que ha tenido en el deporte, la historia, las flores y la cerveza los elementos más destacados junto a la Gran Huevada organizada por Villafranca de Córdoba, en la que se han repartido casi 900 huevos fritos acompañados con chorizo de Espejo. Aguilar de la Frontera dio después a probar su plato típico llamado joecas. Mientras centenares de personas degustaban los productos de la tierra, el resto paseaba por la Feria, donde también se han registrado importantes ventas de productos gastronómicos y artesanos.

Tiro con arco organizado por Almodóvar del Río. Óscar Barrionuevo

La mañana arrancó con la actividad ‘Saboreando tu historia’, una recreación teatral con personajes relacionados con Puente Genil que se viene ofreciendo durante el fin de semana con gran éxito, y ha continuado con una cata de cervezas artesanas que elabora una empresa de Fernán Núñez. Asimismo, Aguilar de la Frontera ha proyectado el vídeo promocional ‘Aguilar abre sus puertas’ para mostrar los encantos de la localidad.

Por su parte, Palma del Río y Almodóvar se han decantado por el deporte con exhibición de kárate y tiro con arco. Posteriormente, la localidad cuca ha organizado un taller de pintado de azulejo andalusí.

Asistentes a la cata de flores en el salón de actos de la Diputación. Óscar Barrionuevo

El salón de actos de la Diputación ha acogido además una curiosa cata de flores impartida por la enóloga Mara de Miguel en la que ha dado a probar 16 flores comestibles maridadas con vinos de Montilla-Moriles.

En palabras de la presidenta del Instituto Provincial de Desarrollo Económico de Córdoba (Iprodeco), Dolores Amo, “la feria ha vuelto con fuerza y con la alegría de volver después de dos años de pandemia, muy difíciles para nuestros vecinos. Desde la Diputación de Córdoba e Iprodeco hemos dado lo mejor de nosotros para establecer este escaparate”.

Amo ha apuntado a que “hemos contado con 72 municipios de nuestra provincia y nos han traído lo mejor de ellos mismos, un recorrido por su patrimonio, historia, cultura y ese medio natural. Hay que recordar que nuestros pueblos están enclavados en el mundo rural y pensaban en el turismo como mecanismo de desarrollo y hoy es una realidad”.

La también vicepresidenta primera de la Diputación señala que “respecto al turismo tenemos mucho que decir. Tenemos pueblos en Córdoba separados por muy pocos kilómetros y estamos preparados para albergar a todas esas personas que nos quieran visitar. Con un matiz muy importante, que tenemos gente maravillosa que quiere compartir con todo el que nos visita todo aquello que hemos heredado y que queremos dejar a generaciones futuras".