Un máximo de 15 mujeres registradas como víctimas de violencia de género o en condiciones de exclusión social optarán a un contrato temporal de seis meses en el servicio de ayuda a domicilio de Lucena. Un acuerdo suscrito entre el Ayuntamiento y la empresa Arquisocial, adjudicataria de esta prestación, favorece sendos cursos de formación e inserta el determinante compromiso de la concesionaria de incorporar a la plantilla, en principio en un régimen transitorio, a las participantes que culminen el período de capacitación con un resultado satisfactorio. 

El primer período de aprendizaje comprenderá 480 horas y oferta siete plazas. Con carácter subsidiario, si existen vacantes, Servicios Sociales abriría esta iniciativa didáctica en el ámbito sociosanitario a otros colectivos vulnerables, brindándose también a hombres. 

Las sesiones se imparten en el Centro de Formación Técnica y Nuevas Tecnologías de Lucena. El Ayuntamiento ha diseñado programación bienal y renovará el convenio, con Arquisocial o entidad especializada, en la segunda anualidad. 

Antonio Valera, responsable en Andalucía de Arquisocial, manifestaba ayer que la intención última consiste en «que las personas se queden trabajando con nosotros» debido a que necesitamos recursos humanos y, de este modo, las futuras trabajadoras «podrán tener una mejor calidad de vida». Tanto los formadores como el Ayuntamiento y Arquisocial efectuarán «un seguimiento exhaustivo y una evaluación» del proceso formativo. 

La responsable de Servicios Sociales, Carmen Gallardo, calificaba de «fundamental» la garantía de contratación y hablaba de «relaciones bastante fructíferas» entre el Consistorio y la prestataria de esta cobertura pública.

Arquisocial gestiona la ayuda a domicilio desde el pasado mes de abril y Gallardo afirmaba que «está cumpliendo al 100% con todos los requisitos del Ayuntamiento» y «respeta al pie de la letra» el pliego de condiciones. Con todo ello, se mostraba convencida de que la auditoría «saldrá positiva, en unos meses, cuando se ponga en marcha».

Desde septiembre, además, las empleadas, después de numerosas reuniones y conversaciones, perciben el 6,5% de incremento salarial, ligado al IPC. «Estamos muy contentos», insistía Gallardo, porque «somos pioneros en hacer efectivo» este incremento en las retribuciones pese a que aún, puntualizaba la concejala socialista, no concurre una sentencia firme del Tribunal Supremo.