El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil ha investigado a dos personas propietarias de 13 ovejas y un caballo a los que, supuestamente, dejaron morir en plena ola de calor en el mes de julio en La Carlota por falta de agua y atención.

Según informa la Guardia Civil en un comunicado, tras tener conocimiento de la existencia de una oveja muerta en una explotación ganadera de la localidad de La Carlota, los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza hicieron una inspección que permitió comprobar que había varios animales más de la especie ovina muertos por diferentes lugares de la parcela, así como un equino muerto y solo una oveja con vida.

Los guardias civiles pudieron observar que en la explotación existía una zona con bebederos, la mayoría de estos sin agua o con una mínima cantidad, siendo el único lugar donde los animales podían acudir a beber, si bien en los terrenos existía gran cantidad de pasto del cual se alimentaban.

 En el informe realizado por la Oficina Comarcal Agraria de la zona no consta enfermedad contagiosa alguna de animales ovinos y equinos, por ello la muerte de los animales pudiera presuntamente haberse debido a una falta de cuidado y atención adecuada acorde a las condiciones climatológicas que se dieron en los primeros días del mes de julio, con altas temperaturas máximas diarias.

Por todo ello, los guardias civiles procedieron a la investigación de los propietarios y responsables de la explotación, como presuntos autores de un  delito relativo a la Protección de la Flora, Fauna y Animales domésticos, por maltrato animal.