La autorización oficial para acometer las obras de ampliación del almacén de residuos radiactivos de El Cabril, en Hornachuelos, no estará disponible hasta el año 2024, según informó ayer el presidente de Enresa, José Luis Navarro.
Navarro facilitó esta información con motivo de la apertura del 18 Seminario de Periodismo y Medio Ambiente, organizado en Córdoba por la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa), en colaboración con la Asociación de Periodistas de Información Medioambiental, la Diputación y el Ayuntamiento de Córdoba.
Dicha fecha, no obstante, no impedirá que la entidad cumpla con los plazos previstos para acometer dichas obras para las nuevas celdas que acojan los restos del desmantelamiento de las centrales nucleares de España. En concreto, residuos de media y baja actividad. Navarro recordó que Enresa presentó en julio toda la documentación necesaria para las citadas obras ante el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco) y el Consejo Nacional de Seguridad Nuclear (CSN), pero matizó que «conociendo los plazos con los que habitualmente trabaja el CSN, que tiene que, preceptivamente, emitir un informe antes de que el Ministerio tome la decisión de autorizar, nosotros calculamos que los técnicos necesitarán al menos dos años», para dar el visto bueno a los trabajos previstos.
Añadió Navarro que para solicitar la citada autorización, la empresa pública ha aportado «una información técnica muy compleja», lo que justifica que desde Enresa se considere que el documento de vía verde para los trabajos no podrá estar antes del año 2024.
Las obras en cuestión se refieren a la construcción de la denominada Plataforma Sureste, que contará con un total de 27 nuevas celdas de almacenamiento. Los trabajos, según explicó a CÓRDOBA el presidente de la empresa, contarán con dos fases, la primera con la materialización de las quince primeras celdas que podrían estar concluidas en el año 2028 y la segunda se irá levantando posteriormente. Además, Navarro ha explicado que la nueva plataforma estaba ya prevista en el sexto Plan General de Residuos, aprobado en el año 2006 y permitirá al almacén de Hornachuelos seguir adecuando sus prestaciones a las necesidades que genere tanto el uso de material radiactivo habitual, como, y sobre todo, el desmantelamiento de las centrales nucleares que existen en España. La previsión que maneja Enresa es la de mantener el almacén en uso hasta la década del 2040.
El presidente de Enresa destacó en la apertura del seminario que los dos principios fundamentales que persigue la empresa, que cumple 30 años, son la seguridad y la sostenibilidad. Lo primero para garantizar el buen funcionamiento de instalaciones como El Cabril. Y el segundo, porque es necesario tener un lugar donde acoger los residuos ya citados.
En el seminario participan 150 profesionales de la información especializados en Medio Ambiente y sobre el que el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, señaló que tiene dos objetivos, como son propiciar una información veraz sobre la realidad ambiental de la sociedad y, por otro lado, combatir contra los falsos mensajes sobre aspectos tan fundamentales como el medio ambiente, cuyo asunto más preocupante es el cambio climático.
En la presentación del seminario participaron el presidente de la Diputación de Córdoba, Antonio Ruiz, y el séptimo teniente de alcalde del Ayuntamiento de Córdoba, Antonio Álvarez, quienes mostraron su apoyo al seminario y los retos de ambas instituciones y la labor que en dicho ámbito están llevando a cabo, con la Agenda 2030 como horizonte. Además, destacaron, como dijo Ruiz, lo necesaria que es la información medioambiental para entender mejor la sociedad tan cambiante que vivimos en la actualidad.
Por su parte, la presidenta de la Asociación de Periodistas de Información Medioambiental, María García, mostró su satisfacción por la recuperación del encuentro y esbozó el contenido del seminario que aborda asuntos que van desde el tratamiento del medio ambiente a lo largo de la historia de la humanidad, hasta el uso de la radioactividad en la vida cotidiana, pasando por el volcán de La Palma o la información medioambiental y las Fakes News.
«Ninguna civilización ha respetado el medio ambiente»
La primera ponencia del seminario corrió a cargo del paleontólogo y escritor Juan Luis Arsuaga, quien tenía previsto intervenir con del periodista Juanjo Millás, (que disculpó su presencia por videoconferencia) para bajo el título El Medio Ambiente entre sapiens y neandertales, vino a concluir que el hombre desde sus orígenes ha venido atacando de una manera u otra al medio ambiente, pues no solo se ha alimentado de los recursos naturales, sino que ha ido transformando el planeta en función de sus necesidades en cada época, ante lo que hizo una llamada a la reflexión colectiva.
La comunicación ante la erupción de un volcán
La segunda ponencia de la mañana tuvo como protagonista al volcán de La Palma, en el primer aniversario de su erupción. En este caso, especialistas tanto del Instituto Geológico y Minero del CSIC como periodistas canarios explicaron las dificultades con las que se encontraron ante un fenómeno geológico de tal magnitud. Una dificultad que radicaba en saber manejar la información con rigor científico, pero que a su vez tenía unas enormes connotaciones sociales, además de ocurrir en un lugar pequeño con poca experiencia en la presencia masiva de medios de comunicación.
Podcast, ‘fakes’ y noticias positivas
La sesión vespertina del seminario contó con una mesa redonda en la que de dieron a conocer todas aquellas actividades de la vida cotidiana en las que se trabaja con radioactividad. Se completó con dos talleres en los que se formó a los asistentes en la elaboración de un podcast, a cargo de María José Montesinos. El segundo versó sobre el periodismo positivo, coordinado por Alfredo Casares. El tercero de los talleres del seminario abordó el problema de las fake news, en el ámbito del medio ambiente. La jornada terminó con un cóctel organizado por el Ayuntamiento de Córdoba.
