La Guardia Civil investiga a dos personas por la supuesta comisión de un delito de incendio forestal por imprudencia tras el fuego registrado en el paraje del Puerto del Calatraveño. El fuego se inició el 16 de agosto del pasado año 2021, en el término municipal de Alcaracejos y afectó a 606 hectáreas de terreno forestal, agrícola y no forestal.

La Guardia Civil ha explicado que su Equipo de Investigación del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de Córdoba realizó una inspección ocular in situ de la zona de inicio del incendio forestal, así como del patrón de propagación del mismo y recogió distintas pruebas testificales.

En las primeras diligencias ya se puso de manifiesto que sobre la vertical de un eucalipto discurre el trazado de una línea eléctrica de alta tensión de tercera categoría, denominada Ballesta, de la subestación de Puente Nuevo. La línea está conformada por tres cables, con el punto de apoyo más próximo a escasos 15 metros del citado árbol. No se apreciaron indicadores de posible limpieza preventiva, como pudieran ser calles situadas bajo el trazado del tendido eléctrico, libres de vegetación arbustiva y de matorral.

Asimismo, el informe pericial de investigación de causa de siniestro forestal elaborado por la Brigada de Investigación de Incendios Forestales (BIIF) de los Agentes de Medio Ambiente de la Delegación Territorial de Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía en Córdoba, determina «que este incendio se originó como consecuencia de la negligencia en el mantenimiento de la línea eléctrica, encontrándose los tres conductores desnudos dentro de la copa de un eucalipto, en contacto frecuente con las hojas y ramas e incumpliendo las distancias de seguridad tanto verticales como horizontales entre conductores y vegetación que establece la legislación».  

Según detalla la Guardia Civil, tanto la legislación sectorial sobre las condiciones técnicas y garantías de seguridad en líneas eléctricas, como los convenios y procedimientos existentes establecen la obligación de la titularidad de la línea para garantizar la distancia entre los conductores y la masa de arbolado, en este caso con un mínimo de dos metros, atendiendo también a especies de crecimiento rápido, tal y como es el caso del eucalipto.

Establecida la causa del siniestro forestal, fricción de las ramas de un eucalipto con los conductores desnudos del tendido eléctrico, y descartada la posible intencionalidad, con el desarrollo de la investigación se comprobó que la empresa eléctrica tenía implementado un sistema externalizado, a través de la contratación de dos empresas, una encargada de las labores de comprobación y materialización de las medidas preventivas, y una segunda a modo de control de calidad de los trabajos que la primera empresa hubiese realizado. Sin embargo, este sistema ni tuvo eficacia ni ha habido un control de ello.

Así, por el Equipo de Investigación del Seprona de Córdoba se ha procedido «a la investigación de la persona designada por la titularidad de la línea eléctrica, así como del administrador de la empresa contratada por esta primera mercantil para las labores de mantenimiento en materia de prevención de incendios forestales». Las diligencias han sido puestas a disposición del juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Pozoblanco. 

Los afectados reclaman por sus pérdidas

El incendio se declaró el 16 de agosto y no se dio por extinguido hasta el día 20. Comenzó en el Calatraveño y se extendió por la sierra de la Chimorra. Las llamas arrasaron monte mediterráneo de encinas, alcornoques, pinos y jarales mixtos junto a cultivos de olivar de sierra.

Las denuncias de los afectados fueron presentadas ante la Guardia Civil de Villanueva del Duque y la causa fue asumida por el juzgado de Instrucción número 1 de Pozoblanco.

Los vecinos y propietarios afectados por el incendio crearon una plataforma para «la completa recuperación de las zonas afectadas, desde una perspectiva ambiental» y para el «resarcimiento de los daños ocasionados a los vecinos y propietarios, la derivación de las responsabilidades pertinentes a los responsables del incendio, y el fomento del control y la prevención de actividades en la zona que puedan entrañar riesgo de incendio forestal». Los propietarios cuentan con un despacho de abogados de Córdoba que se encarga de su asesoramiento legal para las reclamaciones por los daños sufridos.

El incendio afectó a ambos márgenes de la carretera N-432 y la Guardia Civil ayudó en la evacuación de algunas personas que quedaron atrapadas por las llamas. El Infoca contó con un amplio dispositivo por aire y tierra que trabajó para controlar primero el incendio, que alcanzó un perímetro de 31 kilómetros, y luego extinguirlo. Desde el 2007 no se producía un incendio de esta envergadura en la provincia.

Además, Alcaracejos podrá también optar a las ayudas que el Ministerio de Política Territorial convocó para entidades locales por zonas gravemente afectadas.