Respaldo unánime del Ayuntamiento, a través de un acuerdo plenario, a la pretensión de declarar la santería de Lucena como Bien de Interés Cultural (BIC). La Junta de Andalucía, que ya ha mostrado públicamente su respaldo, a través de la consejera de Cultura y Patrimonio Histórico, Patricia del Pozo, ha de aprobar esta protección patrimonial sobre este arte tradicional de procesionar a las imágenes de pasión y gloria en la localidad. El expediente que se remite al Ejecutivo andaluz incorpora, aparte del pronunciamiento favorable de la Corporación, una memoria redactada por un grupo de ciudadanos que impulsó, en 2019, esta iniciativa, ideada por el actual concejal de Fiestas, Costumbres y Tradiciones, José Pedro Moreno. El documento, de descripción histórica, lleva la firma de Antonio Rafael García Oliveros, Manuel Guerrero Cabrera y Antonio Nieto del Espino.
Con dos siglos de historia, el sentido nuclear de la santería radica en el modo, genuino y exclusivo, de desarrollar el culto público de las representaciones cristíferas, marianas y de otros santos. Una costumbre peculiar que en Lucena trasciende del hecho central y engloba un extenso ritual de convivencia, vocabulario, composición jerárquica, atuendos, ritmo o compostura.
En el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico ya constaba información específica acerca de la santería y, en el transcurso de este proceso que persigue la acreditación como patrimonio inmaterial, estas referencias han sido ampliadas y precisadas. Desde el Ayuntamiento, una vez obtenida la ratificación en la sesión plenaria de anoche, confían en una pronta inscripción de la santería en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz.
La memoria, concluida en este año 2022, incide en atributos y rasgos singulares de la santería como conceptos identitarios y su relevancia en diversas esferas de Lucena; su pervivencia durante casi 200 años; la referencia superlativa del Viernes Santo; los elementos articuladores y los diferentes roles del santero, entre ellos, el manijero, que guía, organiza y elige a la cuadrilla.
Frente a las amenazas o riesgos, se propugna la salvaguarda de la santería, a través de las procesiones infantiles, publicaciones en revistas cofradieras o la exposición, en San Pedro Mártir, La santería: una manera de sentir.
