Disminuir el precio de la energía eléctrica a 35 megavatios por hora, durante 25 años, es el objetivo último de un movimiento vecinal basado en cooperativas de autoconsumo. Ensayado con éxito en el País Vasco con la denominación de Ekiluz y promovido por el grupo Mondragón, este proyecto, a través de Faecta, la Federación Andaluza de Empresas Cooperativas de Trabajo, ya se impulsa en localidades de la provincia de Córdoba como Bujalance y Carcabuey. En Lucena, la Federación de Asociaciones Vecinales organiza este próximo sábado una jornada informativa sobre este modelo eficiente. Desde las 10.00 horas, en el Palacio Erisana intervendrán miembros de Enredcoop, Ekiluz, Mejorana, la Universidad de Córdoba y de la Agencia Andaluza de la Energía.
Las cooperativas vecinales precisan, como mínimo, de 800 miembros para implantar y activar una miniplanta fotovoltaica. En el espíritu de esta opción económica, limpia y asequible económicamente, se prioriza la cesión de fluido eléctrico a los ayuntamientos para que, a su vez, lo transmitan a las familias vulnerables. El presidente de la Federación de Asociaciones Vecinales de Lucena, Javier Morales, ha expuesto que este ciclo de ponencias «casi se convoca en defensa legítima de los consumidores». Desde Faecta, su presidente en Córdoba, Francisco Molina, ha afirmado que «convertir a los ciudadanos en consumidores y prosumidores» constituye «un avance innovador» por su trascendencia social y económica.
Faecta aboga por alentar a los ciudadanos a poseer pequeñas extensiones de producción de energía, de 1 y 2 megas. Este colectivo ya ha suscrito un acuerdo, en este sentido, con la Diputación de Córdoba.
