La Denominación de Origen Protegida Montoro-Adamuz ampara 55.000 hectáreas de olivar situadas en la Sierra Morena cordobesa, en los términos municipales de Adamuz, Montoro, Espiel, Hornachuelos, Obejo, Villaharta, Villanueva del Rey y Villaviciosa de Córdoba. La orografía del marco protegido marca indudablemente tanto las prácticas agrícolas como la producción y la calidad de los zumos obtenidos.

Montoro-Adamuz protege un olivar de sierra que se establece en una situación prácticamente única, en la que los olivares se encuentran integrados en un entorno natural excelentemente conservado, con prácticas agrícolas sostenibles, siendo fuente de riqueza natural y refugio de especies protegidas, reconocida en toda su extensión como Zona de Especial Conservación (ZEC) de la biodiversidad dentro de la Red Natura 2000 de la Unión Europea, incluidas las áreas del Parque Natural Sierra de Hornachuelos y el Parque Natural Sierras de Cardeña-Montoro.

"La orografía del marco protegido marca indudablemente tanto las prácticas agrícolas como la producción y la calidad de los zumos obtenidos"

El aceite de oliva virgen extra de la DOP Montoro-Adamuz es fruto de un coupage natural de la variedad picual y la autóctona nevadillo negro, que producen aceites muy específicos, siendo sus atributos positivos el de frutado de aceituna intenso y verde hoja alto, así como un característico picor y amargor, rasgos positivos que le confieren un equilibrio sensorial y un sabor único.

"Como olivar de sierra, nos encontramos en una situación en la que los costes de producción son elevados, accidentada orografía que dificulta la mecanización agrícola, lo cual incide en que su mantenimiento sea poco rentable ante los bajos precios de los últimos años debido al aumento de las producciones en España y terceros países. Por ello, nuestro objetivo es continuar aumentando la calidad del producto y la comercialización, lo cual nos permita aumentar la competitividad de nuestro aceite en el mercado", señala el presidente de la DOP, Francisco Terán.

Y afirma que "nos encontramos en una campaña de producción media y de muy alta calidad gracias a las mejoras realizadas en las últimas campañas por los agricultores y las cooperativas productoras, con la recolección temprana de aceitunas seleccionas que dan aceites de un frutado intenso muy valorados en el mercado por su alta estabilidad y su alto contenido en polifenoles". La producción olivarera es el principal valor económico de la comarca protegida por el gran volumen de mano de obra necesaria para recolección de la aceituna.

Terán considera que la próxima campaña será "muy similar a la anterior", con una media de más de 60 millones de kilos de aceituna y unos 10 millones de aceite de oliva virgen extra entre las cinco cooperativas inscritas en la denominación de origen que pertenecen al grupo Dcoop: Cooperativa Nuestra Madre de Sol de Adamuz, SCA Olivarera Nuestra Señora de la Merced de Montoro, SCA Olivarera de Montoro, SCA del Campo San Antonio Abad de Obejo y SCA Olivarera del Guadiato de Villaviciosa.

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"Hay que seguir apostando fuertemente por la calidad, aumentando la competitividad del producto y abrir nuevos mercados a través de fuertes estructuras de comercialización con las cuales aumentar las ventas y el consumo, sobre todo en el mercado de exportación y que no bajen las cotizaciones del aceite a niveles que hagan inviables las explotaciones", acaba.