El emblemático edificio de El Parador, situado en la salida norte de Montilla hacia la carretera nacional N-331, recuperará su imagen exterior en apenas siete meses. Ese es el objetivo marcado por el Ayuntamiento de Montilla tras la firma este viernes del acta de inicio de las obras de estabilización y consolidación del inmueble.

La actuación, adjudicada por algo más de 667.000 euros a la empresa malagueña Hermanos Campano, permitirá frenar el deterioro del edificio y reforzar las estructuras existentes. Para ello, será necesaria la eliminación de los elementos que presentan en la actualidad un «peligro inminente de caída» y la adecuación de la envolvente, un trabajo que se desarrollará «en aproximadamente siete meses», un plazo algo inferior al inicialmente previsto.

Según el arquitecto municipal, Carlos Cobos, «estas obras de urgencia darán respuesta a los fallos detectados tanto en cubiertas como en estructuras». De este modo, la obra se iniciará con el desmontaje de los elementos con riesgo de derrumbe para, posteriormente, recuperar el inmueble.

«El objetivo de esta primera fase es evitar que ese deterioro continúe para que, en una segunda fase, se ejecute la adecuación para su puesta en uso», explicó Cobos, quien reconoció que la «carga simbólica» de este edificio, que se sitúa en la entrada de Montilla, ha llevado al Ayuntamiento a querer recuperar su aspecto exterior, «al menos, en los bordes del perímetro y en los elementos más característicos, como el molino».

El alcalde, Rafael Llamas, destaca el "consenso unánime" de todos los grupos políticos para la recuperación de El Parador

Por su parte, el alcalde, Rafael Llamas, resaltó que la recuperación de El Parador ha contado con el consenso unánime de los grupos políticos de la Corporación, «por entender que se trata de un elemento importante dentro del patrimonio y la historia de la ciudad». 

«Queremos que sea un recurso vinculado a nuestra cultura del vino y que, además, sea capaz de generar desarrollo económico», recordó el primer edil, en referencia al proyecto para su conversión como Centro de Recepción de Visitantes.

La parcela en la que se encuentra El Parador tiene una superficie de 1.731 metros cuadrados de suelo. El edificio principal, el único que permanece en pie, ocupa 652 metros cuadrados, destacando dentro del conjunto un gran patio de 176 metros. De esta forma, el futuro Centro de Recepción de Visitantes se desarrollaría en los 1.080 metros cuadrados construidos, mientras que el resto de parcela permitirá desarrollar otros usos complementarios.

Según Llamas, la recuperación de este edificio permitirá al Ayuntamiento de Montilla acceder a fondos europeos con la vista puesta en una segunda fase con la que, finalmente, podrá ponerse en uso. 

«El Parador se convertirá en uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad», aseveró el alcalde, a la vez que indicó que se trata de un proyecto que «encaja» en las líneas de ayudas europeas.

El Parador de Riobóo fue utilizado originariamente como casa de postas para las diligencias que recorrían Andalucía a finales del siglo XIX. A pesar de ser un inmueble con un nivel 2 de protección global, su mal estado de conservación ha sido motivo de numerosos informes municipales desde la década de los noventa.