El Ayuntamiento de Cabra ha instalado en estos días unos innovadores y sostenibles sistemas smart de la compañía Anticimex, que a modo de prueba, durante tres meses, permitirán controlar de forma preventiva la población de roedores, según ha dado a conocer la delegación municipal de Medio Ambiente.

Estos han sido instalados en el colegio Carmen de Burgos y en el alcantarillado público para, a través de un sensor de movimiento y de temperatura, hacer un control preventivo de las plagas de roedores, recordando que la presencia de roedores en núcleos urbanos y en zonas escolares puede suponer un riesgo para la salud y el bienestar de la ciudadanía y la calidad del entorno.

Se trata, según la delegación municipal, de un sistema tecnológico que, con trampas inteligentes, persigue evitar la proliferación de ratas.

El colegio Carmen de Burgos ha sido elegido para estas pruebas, según la delegación, porque comparte con Anticimex los valores por la sostenibilidad y la responsabilidad con el entorno y el medio ambiente, un compromiso enmarcado también con un proyecto educativo que el centro educativo desarrolla y que se basa en el ecodiseño y en el no uso de productos tóxicos, al estar adheridos a la red Ecoescuela de Andalucía y también porque, además, está ubicado en las inmediaciones del río Cabra y rodeado de arboledas y huertas.

El servicio, denominado Smart Eye, consiste en un sistema digital de sensores de movimiento y temperatura que permiten detectar al roedor de manera proactiva. Gracias a sus pequeñas dimensiones, suele colocarse en espacios estrechos y zonas de difícil acceso donde suelen esconderse los roedores. Por otra parte, está el sistema Smart Pipe, diseñado específicamente para acabar con los roedores directamente en el alcantarillado.

Tipos de dispositivos

Los dispositivos empleados para el control de plagas son sostenibles y ecológicos, por lo que no emplean productos tóxicos. Con todo, la tecnología Smart de Anticimex sigue la tendencia europea de reducir al máximo los productos químicos y respetar el medio ambiente.

Este sistema permite monitorizar en tiempo real y realizar un seguimiento on line, desplazando a los técnicos cuando realmente es necesario. Esto se traduce en una mayor eficiencia y reducción del número de desplazamientos innecesarios que contribuye a disminuir las emisiones de CO2.

Por todo ello, Segundo García, delegado de servicios de Anticimex en Córdoba, subraya la apuesta de la compañía por "ofrecer soluciones nuevas e inteligentes a todas aquellas ciudades y municipios que tengan entre sus prioridades reforzar y mejorar el control de plagas con servicios innovadores y respetuosos con el medio ambiente al mismo tiempo".

Anticimex ha adquirido este compromiso con la escuela de Cabra alineado bajo su estrategia de futuro Visión Zero. La compañía se ha marcado un ambicioso reto para los próximos años: tener la capacidad de desarrollar el trabajo de control de plagas, desinfección e higiene ambiental con la seguridad y eficacia de siempre, pero de una forma 100% sostenible y responsable con el entorno medioambiental y social.