Como tantos de sus paisanos de Ochavillo del Río, Juan Jiménez tuvo que emigrar muy joven para buscarse el pan. Se fue desde esta entidad local autónoma de Fuente Palmera a Menorca, donde se formó como profesional del poliéster, trabajando en el sector náutico principalmente. Por añoranza, con 45 años, se volvió a su tierra y montó en Palma del Río una fábrica de poliéster. Pero la crisis del 2008 le golpeó de lleno y tuvo que buscar nuevas alternativas. Pensó en darle un nuevo uso a la fábrica, convirtiendo la nave en una envasadora de agua osmotizada, y poner en práctica el proyecto que más tarde ha desembocado en Vit-Cola.
Este propósito se remonta a la infancia de Juan, cuando acompañaba a su abuelo al campo a pastar con el ganado. En la fuente de La Polvorilla, se fijaba que su abuelo y otros pastores introducían en los cántaros de agua unos palillos de yerbas como hinojo, menta poleo, etcétera, amarrados con un cordel.
Aquella agua resultaba muy fina y con un sabor suave. «Se me quedó grabado que mi abuelo decía que aquello era muy digestivo». Antes de empezar a madurar la idea del Vit-Cola, Juan probó un proyecto con la estevia, que no llegó a buen término, aunque le valió para conseguir el endulzante de su futuro refresco vegetal.
Luego vinieron meses de ensayos, de continuas fusiones de extractos de frutas y plantas. El primer producto resultante era muy herbáceo, «con un sabor muy auténtico, pero pensé que no iba a gustar». Entonces empezó a trabajar y a asesorarse con distintos laboratorios de biología para ir afinando y alcanzar una trazabilidad y todos los requisitos exigidos por Sanidad, ya que hasta ahora todo era en plan casero.
En esta fase entró en colaboración con una fábrica alemana y otra de Barcelona que le realizaron la sintetización de las plantas para obtener el producto concentrado y las esencias que Juan pretendía, eliminando ese sabor tan a hierbas. El Vit-Cola estaba a punto de nacer. Jiménez afirma que su producto es una bebida nutricional y saludable, con todo el aporte de las vitaminas B y C que contiene, las cuales contribuyen a tener una correcta digestión, reforzar los huesos y el sistema inmune o aumentar el oxígeno en sangre, entre otros beneficios. Vit-Cola no contiene azúcar, gluten, alcohol, cafeína ni ácido fosfórico.
Juan ha hecho una primera tirada de 9.000 botellines. Su medio de venta principal es internet, sobre todo a través de Instagram. En cuanto a venta directa, ha empezado por su pueblo. Así que en todos los bares de Ochavillo está a disposición de los clientes.
