La Junta de Andalucía ha finalizado las obras de mejora y adecuación de la vía pecuaria Vereda de Córdoba a Cañete, en Bujalance, según ha informado el delegado de Desarrollo Sostenible en Córdoba, Giuseppe Aloisio, quien junto la alcaldesa del municipio, Elena Alba, y el gerente provincial de Tragsa, Francisco Herrera, ha visitado el resultado de las obras para comprobar el resultado de la finalización de los trabajos.

Aloisio ha destacado que las obras que se han llevado a cabo “han eliminado los problemas de tránsito que existían en una zona de la vía pecuaria facilitando los desplazamientos agrícolas en el municipio”.

El delegado ha señalado que la actuación principal ha consistido en la “eliminación de una zona donde se hacía imposible el tránsito, mediante la sustitución de 33,44 m3 de losas antiguas de hormigón por otras nuevas, así como su protección mediante más del 1.000 m³ de escollera de piedra natural”.

Igualmente se ha procedido al acondicionamiento del terreno mediante excavación y extendido de 1.599,98 m3 de tierras; así como la construcción de 1.034,m3 de escollera de protección y de 2 losas inundables de hormigón de 27 y 17 metros de longitud respectivamente.

La inversión llevada a cabo para acometer estas obras, llevadas a cabo por la empresa pública Tragsa, asciende hasta los 72.000 euros.

La obra se encuadra en un encargo a la empresa pública Tragsa, cuyo objeto es la ejecución de actuaciones de adecuación y mejora de la Red Andaluza de Vías Pecuarias, que por la prioridad marcada en el Plan de Recuperación y Ordenación, “requieren una intervención inmediata”, precisa el delegado. Estas actuaciones se enmarcan dentro del Programa de Desarrollo Rural de Andalucía, incluidas en las medidas de desarrollo rural que contribuirán específicamente a la consecución de una o varias prioridades de desarrollo rural de la UE.

Como ha explicado el delegado, las vías pecuarias constituyen ejes de comunicación rural, que facilitan las actividades económicas agrarias y ganaderas, “en especial en aquellas zonas menos favorecidas o de dificultad especial, por lo que la mejora y acondicionamiento de estas infraestructuras, contribuye de manera decisiva, al desarrollo socioeconómico sostenible de los territorios rurales que atraviesa”.