El catedrático de Historia Moderna de la Universidad de Córdoba, Enrique Soria Mesa, director académico de las decimoquintas Jornadas de Historia Cardenal Portocarrero de Palma del Río, cree que este año se «han abierto nuevas líneas de investigación para futuras ediciones», como la figura de Alonso de Luna, un destacado militar palmeño, judeoconverso y gran servidor del Estado. Destaca asimismo Soria el «papel de algunos palmeños en la monarquía».

Asimismo, apunta que en esta edición, dedicada a la herejía, la Inquisición y las cofradías en la Edad Moderna, ha puesto de relevancia nombres de ilustres palmeños de este período histórico y la larga nómina de judeoconversos en la Villa de Palma y la actuación de la Inquisición.

Soria indica que este encuentro científico «ha abordado el estudio de distintas formas de religiosidad y espiritualidad».  Son, en definitiva, páginas de la historia local que, además, se pueden ver en la exposición Córdoba en llamas: Inquisición y conversos, en el Museo Municipal hasta el 26 de noviembre.

La muestra del Laboratorio de Estudio Judeoconversos de la UCO recoge autos de fe de palmeños, donde aparecen víctimas de la Inquisición, como la familia Cazalla, o autores palmeños en el índice de libros prohibidos, donde figura la obra de Fray Bernabé de Palma Vía Spiritus, autor y obra de la que habló el profesor Rafael M. Pérez García.

La llegada de las cofradías penitenciales

El doctor en Historia y académico Juan Aranda Doncel, en su conferencia, a la que se sumaron representantes del mundo cofrade local, destacó la presencia de las órdenes franciscanas y dominicas y la llegada de las cofradías penitenciales en el segundo tercio del siglo XVI. La primera fue la Vera Cruz, seguida de la Soledad y Jesús Nazareno. Como sedes, las dos primeras optaron por la parroquia de San Francisco y la última se instaló en el Hospital de San Sebastián.

Otras conferencias han girado en torno a la ortodoxia cristiana, con el profesor de Historia Moderna de la Universidad de Sevilla, Rafael Pérez García, que habló de La herejía en Palma del Río en el siglo XVI: entre conversos, místicos y alumbrados, hasta la desviación de la norma, con su conferencia sobre como escapar del control inquisitorial; y el estudio de Antonio J. Díaz, profesor de Historia Moderna de la UCO, premio nacional d e Historia, sobre La Inquisición Española: el Tribunal de Córdoba.

Estas jornadas Históricas de Portocarrero, a través del patrocinio de varias empresas y entidades de la localidad, han entregado 8 becas, con una cuantía total de 4.800 euros, a los alumnos con los mejores expedientes de bachillerato de los dos últimos cursos.

«Lo que pasó hace 400 años no es de una época remota»

Antonio J. Díaz Rodríguez, profesor de Historia Moderna en la UCO, último premio nacional de Historia, afirma que la importancia de las jornadas de Historia Cardenal Portocarrero es «una oportunidad de oro para que los historiadores nos pongamos en contacto con la sociedad, aportar nuestro granito de arena a la identidad de los pueblos y su desarrollo».

En esta línea defiende que «es imposible entender por completo lo que nos pasa hoy, en todos los aspectos, sin conocer el pasado, saber cómo era la sociedad, cómo era hace 400 años no es de una cosa remota». Sobre el tema que ha abordado en esta edición, la Inquisición, precisa que «hay que entender que nosotros hoy somos todos ellos, somos descendientes de ambos lados».

En su conferencia, el profesor Díaz Rodríguez subrayó que «el patrimonio documental palmeño es impresionante» y que «la Inquisición cambió la vida de los pueblos hasta la época contemporánea».