El veterinario responsable del centro de acogida de Lucena ha analizado por orden judicial al perro que presuntamente atacó al niño Dylan causándole la muerte. En este momento, la investigación está centrada en el pastor belga malinois, descartando de momento la participación de un dóberman al que habían apuntado algunos testigos.

El objetivo de esta prueba veterinaria era comprobar aspectos importantes para la investigación, como es la apertura de la boca , el largo de los dientes, y las huellas en el cuerpo del animal. El perro fue inyectado para su sedación, sin oponer resistencia. De momento se ha descartado practicarle la eutanasia.

Cabe recordar que la muerte del niño Dylan de 4 años atacado por un perro en Lucena conmocionaba a la localidad, que aún permanece estupefacta por lo acontecido. El inspector jefe de la Comisaría de la Policía Nacional Lucena-Cabra , José Luis Puerta, señalaba que se están llevando a cabo las investigaciones necesarias que conduzcan al esclarecimiento de los hechos.

El suceso aconteció en la madrugada del pasado domingo, en la casa de la carretera de Lucena-Rute donde la familia del menor trabaja y a la que al parecer se había desplazado hace solamente un mes. El padre del niño es de nacionalidad colombiana, y tiene unos 30 años de edad, mientras que la madre es lucentina de unos 23 años.

Según informaron fuentes de la investigación, el animal entró en un dormitorio de la planta superior de la casa, donde dormía el menor solo y le atacó. Sobre las 3 de la mañana el niño fue trasladado al Centro de Salud Lucena 1, donde los sanitarios solo pudieron certificar su fallecimiento. Durante la mañana del lunes la Policía Judicial y Nacional estuvo durante varias horas en la vivienda, para investigar los hechos.

En la casa contigua, también propiedad del mismo dueño , se encontraban el propietario y su pareja, así como la vecina que habita en ella y que estaba en su casa en la noche de los hechos, la cual ya había prestado declaración ante la Policía Nacional.