La Cooperativa Olivarera Los Pedroches ha destacado este jueves que, una vez valorada la situación en la que han quedado los olivares de la zona ante el incendio forestal de Alcaracejos, muchos de ellos de socios de la entidad, «se ha demostrado que olivar bien gestionado y sostenible es una barrera efectiva contra incendios forestales de esta magnitud», de manera que demanda nuevas ayudas al olivar de sierra.

Así lo expresaba en un comunicado el presidente de Olipe, Juan Antonio Caballero, quien explicó que «la afectación a los olivos ha sido relativamente baja con respecto a la gran magnitud del incendio y a la gran extensión de olivares que linda con las manchas de monte del Calatraveño y la Sierra de la Chimorra».

Caballero señaló que «hay noticias de olivareros que han perdido cien, 200, 300 y hasta 600 olivos y, aunque eso es grave, no constituyen una extensión elevada de terreno». No obstante, «también hay que tener en cuenta las perdidas en infraestructuras de goteo, naves y cortijos, así como los gastos ocasionados por las labores de extinción, en las que han participado los propios olivareros», ha apuntado.

Es por ello que la conclusión del presidente de la Cooperativa que aglutina a la mayor parte de los socios de la zona se centra más en «la necesidad de que se reconozca la labor de prevención, gestión y desarrollo sostenible que suponen estas explotaciones agrícolas».

Caballero ha advertido de que «si los olivos no son rentables se abandonarán, y si se abandonan el fuego será imparable», de ahí que vea «fundamental incentivar este tipo de cultivos en sierras y en espacios marginales, porque son vitales para conservar un patrimonio que tarda decenas de años en regenerarse y que se puede salvar de forma sostenible y ayudando a estos agricultores y ganaderos de forma directa».