Bajo una abrasadora noche y enmarcado en las medidas contra el covid-19, ayer sábado se celebró la 55ª edición del Festival de Cante Grande Fosforito de Puente Genil con la asistencia de 435 personas, agrupadas de dos en dos y con una separación entre parejas de un metro y medio. Sin repostería, pero con ganas de escuchar cante y de aplaudir al homenajeado, Frasquito, comenzó una noche de cante puro sin sobresaltos, sin ruidos, sin mucha conversación...

Oídos, en su mayoría, de aficionados de los de verdad, quienes pudieron disfrutar de un cartel con artistas del momento y que no siempre se diseña al gusto unánime de la afición. Sobre el escenario, como prolegómeno a una noche que se presumía jonda, Esteban Morales, alcalde de Puente Genil; Francisco Baena Diéguez, Frasquito; Antonio Fernández Díaz, Fosforito; Salud Navajas, diputada de Cultura; Eva Torres, concejala de Cultura, y el experto en flamenco Juan Ortega, quien condujo el evento.

'Frasquito', Esteban Morales, Eva torres, Salud Navajas y 'Fosforito', este sábado en Puente Genil. D.N.R.

Frasquito recibió el aplauso caluroso y merecido de su público, su compañera de vida, un ramo de flores, y el homenajeado, en nombre de su familia, recibió un cuadro en el que se habían enmarcado los carteles de los festivales en los que participó este cantaor en la década de los ochenta. Para finalizar y visiblemente emocionado, Frasquito dijo que el homenaje que recibió ayer lo iba a llevar "siempre en el corazón".

Morales dio las gracias a todos los participantes y asistentes, y "un abrazo a nuestro Frasquito". Dio a conocer "el permanente acompañamiento de este Ayuntamiento al flamenco para hacerlo mejor", viniendo a ser "martillo y yunque" en este arte. "Y estar aquí, a pesar de las circunstancias adversas", tras una edición del 2020 que se celebró a puerta cerrada.

Además, se refirió a Frasquito hablando de un homenaje "más que merecido, con el que le devolvemos todo lo que ha aportado al flamenco", y reiteró el compromiso del Ayuntamiento "por seguir trabajando para defender el flamenco, de ahí que seguiremos cuidando este festival para hacerlo todavía mejor".

La diputada Salud Navajas puso en valor el impulso del Ayuntamiento para "potenciar el flamenco". Y cerró la presentación un Fosforito que a sus 89 años dejó boquiabierto al aforo: "Muchas gracias por estar aquí, ¡con la que está cayendo!". Y apostilló que la municipal "es un foro pontanés de arte por el que han pasado los mejores artistas de cada momento durante 55 años". El cantaor finalizó con unos versos de Lorca: "El cante jondo/ es más verdaderamente jondo/ que todos los pozos/ y aguas del mundo..."

Abrió la edición Laura Vital Gálvez, cantaora de Sanlúcar de Barrameda, que dio muestras de ser una de las promesas más claras del cante flamenco del momento, con unas facultades asombrosas en continuo desarrollo y que levantó al público, especialmente, en su cierre a capela.

Julián Estrada Gálvez, el único pontanés entre las filas de cantaores, actuó en segundo lugar con todo su elenco imponente de artistas y su guitarrista Silveria, que abrió de forma estelar la actuación, que con empuje y el calor de su pueblo bordó.

Ezequiel Benítez es un cantaor de nuestro tiempo, destacó por su excelente sensibilidad ante lo que ocurre cotidianamente, dando muestras de la conversión de lo intangible, lo que otros hicieron de manera descomunal, para traerlo a la realidad, a lo palpable, a través de un discurso fresco y actualizado.

Israel Fernández era esperado por muchos. Nueva estrella del flamenco, con su voz de bronce, como Camarón, subió con empuje acompañado por dos palmeros pontanos, los hermanos Gamero, y todos se entregaron ante la mirada atenta del maestro.

Israel Fernández, en un momento de la actuación ofrecida en el Festival de Cante Grande 'Fosforito'. D.N.R.

Cerrando el festival, que no es tarea fácil, subió a las tablas María Terremoto. Nacida en Jerez, en 1999, demostró la sangre de una estirpe gitana y flamenca que defiende con entrega. Descendiente de la saga Terremoto de Jerez de la Frontera, dio muestras del cante más profundo.

Los guitarristas triunfaron, desde Manuel Silveria al pontanés Jesús Zarrías, pasando por Diego del Morao, Nono Jero, Eduardo Rebollar y Paco León. A las palmas, Samuel Raya y Rafa del Moral; Manuel Valencia y Manuel Cantarote, los hermanos Gamero; Chicharito y El Macano.