La Junta de Andalucía ha adjudicado la redacción del proyecto de medidas compensatorias para el área de nidificación del águila perdicera durante el desarrollo de las obras de la variante de la A-333 a su paso por Las Angosturas. Así lo adelantaban este martes en Priego los delegados territoriales de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, Cristina Casanueva, y de Desarrollo Sostenible, Giuseppe Aloisio, destacando igualmente el «sello verde» que la Consejería de Fomento está incorporando a todas sus actuaciones, como indicaba Casanueva.

Dicho proyecto tendrá un presupuesto, al margen de las obras de la variante, de 160.000 euros, corrigiéndose con el mismo los tendidos eléctricos que no están adaptados frente a la colisión de aves, al ser esta una de las principales causas de muerte de aves rapaces en la zona.

Según señalaba Casanueva, la actuación abarca 260 kilómetros cuadrados, situándose la línea eléctrica más alejada a 15 kilómetros, analizándose 56 tramos de líneas privadas que derivan en 5 líneas eléctricas de media tensión. Medidas con las que, como afirmaba la delegada territorial, «además de crear nuevas infraestructuras, conservamos la flora y la fauna autóctona», añadiendo que este desarrollo sostenible «es fundamental en todos los proyectos que la Junta pone en marcha».

Por su parte, Giuseppe Aloisio ponía de manifiesto que la declaración de impacto ambiental del 2006 «caducó, ya que el proyecto de ejecución de la variante de Las Angosturas previsto para el 2009 nunca llegó a ejecutarse». 

Solicitud ambiental

En este sentido, el delegado territorial de Desarrollo Sostenible recordaba que la solicitud ambiental del proyecto actual fue recibida el 20 de marzo del 2020, «emitiéndose el 22 enero del 2021 el correspondiente informe vinculante favorable, después de recoger las diferentes alegaciones presentadas en el periodo de exposición pública». Según Aloisio, la autorización ambiental considera necesaria la protección de la vegetación de la ribera del río Salado, y la restauración del taray en el entorno del vano central del viaducto.

En cuanto a la fauna, la obra provocará un efecto barrera en la misma, especialmente por la existencia de una especie amenazada como es el águila perdicera, que anida en una zona cercana. En relación a esta especie, cabe señalar que en Andalucía hay censadas 350 parejas, que representan un 40% del total del censo de la Península Ibérica, de las que 41 parejas se localizan en la provincia de Córdoba, ubicadas en Sierra Morena y la Subbética. Así, desde la Delegación de Desarrollo Sostenible se proponen medidas preventivas y compensatorias.

En cuanto a las medidas de carácter preventivo, Aolisio hizo alusión a que el período de mayor vulnerabilidad en el ámbito del proyecto se encuentra entre diciembre y mayo, «por lo que se cita explícitamente que las voladuras y los movimientos de tierra deberán realizarse entre junio y noviembre».

En cuanto a las medidas compensatorias, se propone la corrección de tendidos eléctricos que no están adaptados a la colisión y electrocución de las aves, considerada como la medida más eficaz para proteger la vida de aves rapaces con mayor riesgo de electrocución, siendo esta, como afirmaba Aloisio, «una medida pionera en Andalucía». 

La variante de la A-333 a su paso por el paraje natural de Las Angosturas, actuación demandada por el Consistorio prieguense desde 1977, prevé la ejecución de un nuevo trazado que discurrirá en paralelo a la carretera actual y que permitirá salvar ese peligroso y estrecho tramo plagado de curvas, completando la obra el acondicionamiento del tramo de esta vía autonómica que discurre entre el límite con la provincia de Jaén y el núcleo urbano de Priego.