La noticia sobre la necesidad de ampliación de El Cabril, como consecuencia de la recepción de los residuos procedentes del desmantelamiento de las centrales nucleares del resto de España y el proyecto de Enresa al respecto, ha provocado distintas reacciones.

En cuanto a los representantes políticos de los municipios del entorno de la instalación, la alcaldesa de Fuente Obejuna y su homólogo de Peñarroya-Pueblonuevo, ambos del PSOE, así como las de Granja de Torrehermosa y Azuaga, en Badajoz, pertenecientes al PP, han preferido no pronunciarse hasta conocer la información a través de canales oficiales. Por su parte, la independiente de la localidad sevillana de Alanís, Eva Ruiz, ha manifestado que «estos rumores de ampliación, creo que llevan en lo alto de la mesa desde que se creó el propio almacén y es algo que sale de las competencias de lo local» y «todo el oscurantismo que ha habido en torno a la energía nuclear y las ampliaciones lo único que genera es mucha inseguridad». El primer edil de Las Navas de la Concepción, Andrés Barrera (PSOE) -de la misma provincia- ha subrayado que «poco puedo hacer yo como alcalde porque no está en mi término municipal, aunque es el pueblo más cercano. Será el Gobierno central o la Junta, con permiso del Ayuntamiento de Hornachuelos, pero queremos saber qué va a ocurrir allí. Hay más territorios y esta zona ya ha dado mucho y hecho mucho; por lo tanto, yo creo que lo correcto a su fin sería sellarlo».

El sexto Plan de Residuos Radioactivos, vigente hoy, prevé la construcción de nuevas celdas de residuos de media y baja actividad «entre los años 2025 y 2030». Enresa ha explicado que es en el séptimo, actualmente en tramitación, en el que existe «un único cambio, motivado por el cierre de centrales nucleares».

En la actualidad, la instalación complementaria para el almacenamiento de residuos de baja dispone de autorización para cuatro celdas (29, 30, 31 y 32), que «se van construyendo según las necesidades». En estos momentos han comenzado los trabajos internos previos a la construcción de la número 31, cuya entrada en operación está prevista «en torno al 2026». Sin embargo, para los de media requerirá ser aumentada, debido a lo cual se trabaja en el diseño de una nueva plataforma con 12 celdas de almacenamiento en una primera fase, cuya entrada en operación «se prevé en torno al 2028», estando prevista la construcción de otras 15 -hasta un total de 27- en una segunda fase.