El Ayuntamiento de Palma del Río ha puesto en marcha un proyecto de mejora de la gestión de la red de agua potable y otro de autoconsumo en el marco de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (EDUSI), se trata de una inversión de 413.000 euros financiada en un 80% desde fondos europeos, el 20% restante desde las arcas municipales. El plazo de ejecución de ambas acciones es de 3 meses y la alcaldesa, Esperanza Caro de la Barrera, sostiene que se trata de mejorar el servicio público. Puntualiza que “el agua, como servicio básico y escaso, merece una gestión eficiente y moderna”, y añade que estas acciones contribuyen a “combatir el cambio climático”.

En este planteamiento, el concejal de Servicios Públicos, José María Parra, explica que una de las acciones contempla la instalación de más puntos de control en la red de suministro de agua potable. En concreto, “se trata de la instalación de catorce puntos críticos de agua, que estarán distribuidos en toda la red, incluidos los núcleos diseminados de Mohíno y Calonge, urbanizaciones, polígonos industrial y la propia Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP). Parra precisa que estos puntos incorporan unos sistemas informáticos que recogen en tiempo real una serie de medidas en los reactivos del agua, el cloro, el PH, el manganeso, presión, caudal y turbidez, indicando que “y con todo ello se conseguirá que la cantidad y la calidad del agua sea la misma en cualquier punto de nuestra localidad”. El concejal recuerda que “hasta hoy, el control de la calidad del agua se realiza mediante la toma de muestra que se analizan en el laboratorio de la ETAP”.

Por otro lado, la segunda acción en este proyecto de mejora en el servicio del agua se traslada hasta el puente de hierro sobre el río Guadalquivir. Se trata de plan de autoconsumo para la iluminación de este paso sobre el río grande declarado Bien de Interés Cultural. Se trata de aprovechar la caída y los satos de agua que se encuentran en un depósito en una cota superior a la ETAP, la colocación de una arqueta con una serie de válvulas en el puente y convertir la fuerza del agua en energía para suministrar electricidad al histórico puente, una obra de ingeniería civil de finales del siglo XIX.

Por otro lado, la primera edil ha anunciado que la corporación destina en esta legislatura 1,8 millones de euros para este servicio. Detalla que a través del PFEA en la estación depuradora de agua potable, la mejora de la red en el 2º tramo de la avda. Aulio Cornelio, la nueva tubería de 11 kilómetros hasta el diseminado de Calonge, y con planes provinciales la sustitución de la arteria principal de las avenidas de Santa Ana y Andalucía.