El parque arqueológico de Torreparedones, entre Baena y Castro del Río, alberga restos de la cultura de íberos y romanos. Declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en el 2007, con la categoría de zona arqueológica, Torreparedones recibe 6.000 visitantes anuales. Estas son las claves para no perderse durante una visita:

PUERTA ORIENTAL

Este punto de acceso a la ciudad se descubrió en el 2006

La puerta oriental es el punto de acceso a la ciudad y fue descubierta en noviembre del 2006 aunque ya se sabía que existía desde las excavaciones que se llevaron a cabo en el año 1990. Además, también se puso al descubierto una de las torres. La entrada al yacimiento a través de una muralla fue construida en torno al año 600 antes de Cristo, aunque fue en época romana cuando el primitivo muro fue seccionado con objeto de sustituir la puerta existente por una de mayores dimensiones, flanqueada a ambos lados por dos grandes torreones para su defensa. Dispone de dos aceras para los peatones y un sistema de doble puerta que dificultaría cualquier intento de asalto. Es una puerta monumental, fortificada, lo que da una idea de que el asentamiento tenía que ser importante. Además, es una obra pública de la época ibérica final o romana republicana.

La puerta oriental de entrada. Foto: M. ARIZA

SANTUARIO IBERORROMANO

Los devotos solían acudir por los poderes curativos

Gracias a las excavaciones desarrolladas en los años 2006 y 2007 pudo excavarse todo el complejo religioso, documentándose la secuencia estratigráfica completa. Además, se recuperaron abundantes materiales relacionables con las prácticas culturales allí desarrolladas. Los exvotos pueden visitarse en el museo arqueológico. Se localizó extramuros del asentamiento. Desde el siglo III a.C. al siglo II d.C., los devotos acudieron al santuario atraídos por los poderes curativos asociados a la diosa Caelestis-Juno Lucina-Salus, venerada en este lugar. Identificada como diosa de la fertilidad y la salud, muchos exvotos se corresponden con representaciones de mujeres embarazadas, mientras que otros representan solo la parte sanada del cuerpo.

Imagen del santuario. Foto: M. ARIZA

FORO Y MERCADO

La plaza pública que era el centro político de la ciudad romana

La plaza pública del foro, de unos 550 metros cuadrados aproximadamente, era como un escaparate de la ciudad. Se convirtió en el centro político y atrajo alrededor otros edificios civiles, administrativos y religiosos. En esta plaza destaca una inscripción -la segunda conocida in situ en Hispania- con el nombre del personaje local que pagó la pavimentación de la plaza con losas de piedra: Marco Junio Marcelo. Junto al foro se sitúa el mercado, que ha permitido documentar la estructura de una taberna. Es uno de los escasos ejemplos de este tipo de edificios que se conocen en la Península Ibérica. Un año después de la inauguración se llevó a cabo una campaña en el entorno que permitió identificar los 1.300 metros del foro romano.

El foro de Torreparedones. Foto: M. ARIZA

NECRÓPOLIS ORIENTAL

Están documentadas casi un centenar de tumbas

En mayo del 2012 se llevaba a cabo la intervención en la necrópolis oriental y se halló un recinto funerario, que fue usado en las épocas romana y medieval, en los terrenos donde está situado el centro de recepción de visitantes. Se han documentado cerca de un centenar de tumbas romanas, en fosas excavadas en el terreno y revestidas de lajas de piedra. Destacan allí varias tumbas romanas hipogeas, a modo de mausoleos familiares, que disponen de una serie de nichos en las paredes para poder albergar las urnas que incluirían los restos incinerados. Estas tumbas monumentales pertenecerían a familias con un cierto poder adquisitivo, que construyeron estos monumentos en el cambio de era o el siglo I d.C., mientras que las inhumaciones individuales se fecharían entre los siglos II-IV d.C.

Una de las tumbas de la necrópolis. Foto: M. ARIZA

CASTILLO

Derrumbe y puesta en valor de una fortaleza medieval

En febrero del 2011, mes y medio después de abrirse al público el parque arqueológico de Torreparedones, uno de los referentes del yacimiento en el paisaje y en la historia, el castillo medieval, se vino abajo. Debido al mal estado en que se encontraba, se derrumbó la fachada septentrional, la fachada norte de la torre del Homenaje, que es la que da al interior del patio de armas. En el 2015 se llevó a cabo la puesta en valor de esta fortaleza en la que se recuperaba la imagen perdida y se respetaba estrictamente la estética del monumento. Así, se recuperó el mirador existente en la cubierta de la torre, que es uno de los puntos geográficos más altos de la campiña. La fortaleza es de construcción cristiana y fue concebida por su estratégica posición en la frontera castellano-nazarí. Los documentos de la época lo citan con el nombre de Castro el Viejo.

El castillo de Torreparedones. Foto: M. ARIZA

BASÍLICA CIVIL

Se han conservado los pilares de las 20 columnas

La basílica civil, en el foro, se encontró en septiembre del 2012. Descubrir los restos de uno de los edificios más significativos de una urbe romana era el objetivo principal que se perseguía en esa campaña de excavaciones en el centro monumental. En este edificio se realizaban importantes operaciones comerciales pero, sobre todo, primaba la acción judicial. Es de planta rectangular, con una superficie de unos 350 metros, dispuesta con el lado mayor en sentido norte-sur, de modo que cerraba la plaza forense por el lado oriental, quedando justo enfrente del templo. El pavimento, posiblemente de mármol, no se ha conservado, pero sí los 20 pilares que sustentaban las 20 columnas de la peristasis que rodeaba la gran nave central.

Imagen actual de la basílica civil. Foto: M. ARIZA

ERMITA DE LAS VÍRGENES

El martirio de Nunilo y Alodia por no renunciar a su fe cristiana

En el año 2013 se puso al descubierto la ermita de las vírgenes, que estaba consagrada a las santas Nunilo y Alodia. En el siglo nueve después de Cristo, muchos mozárabes sufrieron el martirio, entre ellas Nunilo y Alodia, dos hermanas de madre cristiana y padre musulmán, que fueron decapitadas por no renunciar a su fe cristiana. La tradición dice que dicho suceso ocurrió en Aragón, cerca de Huesca, pero otras hipótesis, entre las que destaca la del arqueólogo José Antonio Morena, propone Castro el Viejo, donde, desde el siglo XVI, se tiene constancia de la existencia de una ermita dedicada a estas vírgenes. Es de pequeñas dimensiones y reaprovechó en su construcción las ruinas de unas termas romanas. Se conserva parte del altar.

Ermita de las mártires Nunilo y Alodia. Foto: M. ARIZA

VIARIO OCCIDENTAL

La trama urbana de la antigua ciudad iberorromana

Durante el 2014 y el 2015 se realizó una excavación arqueológica que permitió poner al descubierto parte de la trama urbana de la antigua ciudad iberorromana de Torreparedones. En total se documentaron 154 metros lineales correspondientes a cuatro calles presentando un buen estado de conservación, con muros de fachada que superan el metro de altura en los que solo existen dos entradas que dan acceso a sendos edificios de cierta envergadura. El sector más espectacular es el que corresponde a un tramo del decumano máximo. Este viario parece corresponder a la época ibérica y tan solo se vería modificado puntualmente en época romana. Fue incorporado al itinerario turístico del parque en el mes de junio del 2018, tras finalizar las obras de consolidación y puesta en valor.

Parte del viario occidental. Foto: M. ARIZA