Un acuerdo entre el Obispado y el Ayuntamiento de Palma del Río que contempla que el gobierno municipal compre Santa Clara y abandone la construcción de la iglesia en el V Centenario, en obras, ha permitido el consenso entre los grupos políticos municipales, que apoyan la propuesta que pasa por terminar el edificio en obras y que este abra sus puertas como biblioteca pública municipal.

El planteamiento hecho desde Palma al Obispado se traduce en una inversión de 1.510.000 euros en tres anualidades (800.000, 400.000 y 300.000 euros). El alcalde, José Antonio Ruiz Almenara, explica que se adquirirá el antiguo convento de Santa Clara, según la valoración hecha en el año 2006 cuando surgió la permuta del edificio patrimonial (propiedad del Obispado) al Consistorio a cambio de la construcción de una nueva iglesia en la barriada del V Centenario, una obra paralizada desde hace años. Se trata de una superficie de 1.700 metros cuadrados. El templo se planteó con una distribución semicircular bajo una gran cubierta metálica. Es una construcción en una sola planta y también cuenta con salón de actos, salas parroquiales, archivo y sala de juntas y estaba diseñada con vivienda para el párroco.

El proyecto de adaptar la obra de la que iba a ser la nueva iglesia como biblioteca ha sido aceptado por los grupos políticos de la oposición. Fue en el presupuesto del 2017 cuando el equipo de gobierno (PSOE) aceptó una enmienda a IULV-CA y adquirió el compromiso de dotar al municipio de una nueva sede para este servicio municipal. Se creó entonces una comisión de trabajo que presentó al Ayuntamiento que la nueva biblioteca se construyera en el V Centenario. Surgió una propuesta desde Empa, en su momento defendida por el alcalde, de rehabilitar una casa solariega en el centro tradicional, con cargo al Edusi, que albergara la nueva biblioteca.

Desde la oposición, el PP no se mostró en contra de esta alternativa. Por su parte, IU, Andalucistas y Ahora Palma defendían el criterio de la comisión de trabajo. Tras esta salida, que ha encontrado el consenso, Ana Ramos (IU), como grupo proponente, dice que «ahora es un proyecto de todos, los cimientos están hechos». Manuel López (Andalucistas) manifiesta que «puede ser una biblioteca referente». Luisa Venteo (Ahora Palma) señala que «será el templo de los libros». Estos tres grupos coinciden en la luminosidad del edificio y en la cercanía de centros educativos. También señalan que hay espacio para aparcar, con un subterráneo bajo el colindante Espacio Joven Creativo. Cesáreo Callejón (PP) indica que «respetamos el acuerdo con el Obispado, ahora hay que buscar alternativa al centro». El alcalde puntualiza que «el centro necesita un proyecto singular y hay una idea de crear un centro de artesanía y moda».