Quién me iba a decir a mí que mi primer obituario sería sobre mi amigo Paco Tébar, primer alcalde socialista en Villanueva de Córdoba de 1983 a 1990, fallecido al atardecer del día de ayer en su pueblo natal a la edad de 71 años.

Francisco Tébar García, licenciado en pedagogía, llegó a la Alcaldía de Villanueva de Córdoba después de una fuerte implicación en el Referéndum del 28 de febrero por la autonomía de Andalucía. El compromiso adquirido durante aquella campaña andalucista le empujó a encabezar la lista por el PSOE en las elecciones de 1983 de las que salió elegido. Su vida fue la música, y la política fue una circunstancia que desempeñó con entrega y compromiso durante dos legislaturas y de la que salió escaldado con heridas en el alma que nunca manifestó a los amigos y familiares.

Pagó muy caro el precio de haber sido alcalde de su pueblo aún a pesar de haber impulsado la industrialización del sector ibérico, que en los años 80 era una auténtica quimera en toda la comarca de Los Pedroches. Su espíritu humanista y su fe en la cultura para mejorar el mundo le llevó a ser un alcalde con visión comarcal, social e implicado con los otros pueblos de la zona norte de Córdoba, y fue muy popular y querido entre los regidores de aquellos años que cambiaron la monotonía y el apocamiento de los Pedroches con las movilizaciones que se llevaron a cabo para abrir el Hospital Comarcal de Pozoblanco o el arreglo del lamentable estado en el que estaban las carreteras de la comarca.

Pero volviendo a la música, su gran pasión, vocación y devoción, además de los escarceos juveniles, fundó el grupo ‘Jara y Granito’ a mediados de los 70, aún en activo, que ha sido la banda sonora de la vida en Villanueva y toda la comarca de Los Pedroches. Con su mujer, Cati Camacho, que estuvo siempre a su lado con lealtad, amor y complicidad hasta el final, tuvieron tres hijos, Paco, Alejandro y Pablo. Su pueblo, hoy martes 8 de agosto, lo va a despedir en el salón de plenos del ayuntamiento de Villanueva de Córdoba, a las 12 del medio día, después sus restos mortales serán trasladados al crematorio de Pozoblanco donde tendrá lugar a la incineración a las cinco de tarde.