LUCENA

Aprueban incentivos para que los inquilinos compren sus pisos

Araceli Bergillos destaca que es una oportunidad para algunas familias

Aprueban incentivos para que los inquilinos compren sus pisos

Aprueban incentivos para que los inquilinos compren sus pisos

JUAN A. FERNÁNDEZ

La concejala de Viviendas Sociales de Lucena, Araceli Bergillos, ha informado sobre los detalles de un acuerdo que hoy se llevará al Pleno, en concreto el punto 11, en relación a un programa de incentivos que tiene como objetivo facilitar la acción de compra de estas viviendas. El promotor de estos préstamos es la empresa municipal Suelo y Vivienda de Lucena SA (Suvilusa). Actualmente, existen dos bloques de viviendas en régimen de alquiler social (VPO) con opción a compra: 30 en la zona Oeste 1 y 25 en El Zarpazo. El alquiler con opción a compra es de cinco años, desde que se firma el contrato, pero muchas de las familias estarían dispuestas a adelantar esa compra y ser propietarios independientes. Para ello, se ha diseñado este programa de incentivos. En reuniones previas que se han mantenido con Suvilusa, entidades financieras y familias arrendatarias se encontraron con familias «que haciendo un esfuerzo pueden hacer frente a ese pago de la vivienda pero que documentalmente no reúnen los requisitos para que la entidad financiera les conceda un préstamo hipotecario», recalcó la concejala. Evidentemente se van a requerir una serie de condicionantes a estas familias. El primero, establecer un plan de financiación, es decir, antes de que una familia firme unas escrituras de compraventa y tenga unas obligaciones, establecer previamente un periodo de prueba. Entrarían en este programa familias que hacen frente a sus pagos y que abonen durante seis meses, previos a la compra, el importe exacto que les supondría la financiación para que así puedan ser conscientes de si pueden, o no, hacer frente a esta financiación antes de firmar las escrituras. El propietario sería hipotecante no deudor, esto quiere decir que el préstamo sigue siendo de Suvilusa respecto al banco, pero las familias pagarían las cuotas de su vivienda. Si incurrieran en impago, se resolvería el contrato de venta a las seis cuotas sin pagar. Además, anualmente, debe haber un intento de subrogración hipotecaria, es decir que deben intentar, cuando su situación sea más estable, que una entidad financiera les conceda el préstamo hipotecario. Así no dependerían ya de Suvilusa.

Resaltar finalmente que para las familias que ejerzan la opción a compra en el 2017, además de la deducción de hasta el 90% de lo pagado como renta en el precio de compra, recibirán una ayuda para afrontar los gastos derivados de la compraventa.

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