Una vecina de Aguilar de la Frontera será juzgada próximamente por propinar un puñetazo a una médico, a la que también insultó. La fiscalía solicita dos años de prisión, multa de 540 euros y una indemnización de 1.375 euros.

El marido de la procesada acudió el 29 de enero del 2011 al centro de salud para solicitar una visita domiciliaria para su hijo, que tenía fiebre. La médico le dijo, siguiendo el protocolo, que trajeran al niño para poder examinarlo. Media hora después llegó la familia y al acercarse la facultativa al niño la acusada la insultó. Camino de la consulta siguió con los insultos y al entrar en la dependencia le propinó un puñetazo en el hombro que le causó equimosis, ansiedad y estrés postraumático. Acudió la Policía Local, que intentó tranquilizar a la madre, que continuaba insultando.