Cuatro años y nueve meses de prisión, así como una multa de 3.300 euros, es la pena a la que se enfrenta un hombre acusado de atracar una gasolinera en Peñarroya y utilizar el coche de un cliente para huir a Córdoba. El fiscal lo acusa de un delito de robo con intimidación y otro de hurto de uso de vehículo a motor.

Según las conclusiones provisionales del fiscal, sobre las 22.00 horas del 12 de febrero del 2010, el acusado entró en la gasolinera con un cuchillo de grandes dimensiones y con la cara tapada con un pasamontañas. Tras ponerle el cuchillo en el cuello al empleado, le dijo que le diera el dinero o lo mataba, logrando 3.400 euros. A continuación, se dirigió a Córdoba en un coche que un cliente le había dejado para que le hiciese unos arreglos en su taller. Un par de horas después fue detenido en Córdoba.