El tiempo respetó ayer en Puente Genil el primer concurso de paellas organizado por la Hermandad de las Penas, en colaboración con el Ayuntamiento y la Agrupación de Cofradías, Corporaciones Bíblicas y Hermandades. Una iniciativa que contó con un buen respaldo de participantes, puesto que diez fueron los colectivos inscritos a este evento manantero. En la actividad participaron no sólo las cofradías más veteranas, sino también corporaciones más juveniles, que no quisieron perderse el encuentro. Todas elaboraron diferentes paellas, y hasta las tradicionales sopaipas con chocolate, de postre.

El concurso tenía dos objetivos. El primero recaudar fondos para la restauración de la imagen de San Juan Evangelista. El segundo, vivir una jornada de hermanamiento entre cofradías y corporaciones, "algo muy necesario", según comentó el cofrade mayor de la Hermandad de Las Penas, Plácido Pérez, "puesto que hacen falta en Puente Genil más actos que sirvan de conexión entre cofradías y corporaciones".

A la una de la tarde cada uno de los colectivos comenzó el guiso de su paella y a las cuatro de la tarde el jurado las cató para, posteriormente, otorgar premios y diplomas acreditativos. Durante la tarde hubo actuaciones musicales para quien quisiera seguir la fiesta.