El juez de Menores de Granada, Emilio Calatayud, ha clausurado las Jornadas Formativas de la Escuela de Padres y Madres, organizadas por el Instituto de Bienestar Social, planteando la necesidad de alcanzar un pacto por el menor con la implicación de toda la sociedad. Calatayud defiende que la familia es la base de la sociedad, reivindica la figura del padre y el principio de autoridad; lamenta la expulsión de alumnos defendiendo que los colegios tienen que contar con equipos multiprofesionales para atender todas las realidades.

El Juez explica que ha condenado a 21 chicos a aprender a leer y a 250 a sacarse el graudado escolar porque la enseñanza es obligatoria. Calatayud denuncia el consumo de alcohol por parte de los jóvenes en el botellón, y afirma que los móviles de última generación son una droga para el menor. Afirma que lo único bueno de la crisis es que "está bajando la delincuencia en los menores, porque los niños han vuelto a la escuela y los padres están más en casa recuperando principios de austeridad".

La concejal de Servicios Sociales, Reyes Lopera, resalta que en las jornadas han participado más de 300 personas en nueve sesiones formativas.