La regularización de la comunidad de regantes Huertas de Priego abrirá una nueva etapa para los hortelanos de la localidad y, de paso, para los consumidores, que volveremos a degustar, entre otros manjares, tomates como los de antes, o sea, con sabor a tomate, posibilitando al mismo tiempo una diversificación en el sector más que necesaria, toda vez que el monocultivo del olivar y el bajo precio del aceite está poniendo en serios aprietos a muchos agricultores debido a la baja rentabilidad de sus explotaciones.