Entre los miles de visitantes que todos los años recibe el popular Belén de Chocolate de Galleros Artesanos en Rute, el pueblo cordobés de los mantecados, los malagueños se sentirán especialmente identificados en esta campaña navideña.

Y es que este año el ya archiconocido belén rinde homenaje a Málaga, mostrando réplicas en chocolate de monumentos tan significativos como la Alcazaba, el castillo de Gibralfaro, la plaza de toros de la Malagueta o la catedral malagueña. Todas esta réplicas salpican un inmenso belén que ocupa una superficie de 60 metros cuadrados y en cuya elaboración se han empleado 1.450 kilos de chocolate blanco y negro. Además, en él pueden verse hasta 180 figuras e infinidad de detalles en los que también se ha empleado el mazapán.

Siete maestros pasteleros comenzaron a construirlo durante el pasado verano con la finalidad de tenerlo todo listo en estas fechas.

Además de los elementos imprescindibles como el Misterio, por las calles de este belén de dulce se reparten comerciantes, tenderos, pastores o pescadores, porque este año también hay playa y mar, como no podía ser de otra forma, al estar dedicado a Málaga.

Ana Díaz, que es la encargada de guiar a los visitantes por las instalaciones, también explica otras novedades que pueden verse este año, como la Familia Real, cuyas figuras en chocolate también se exponen. A las de años anteriores, doña Letizia y el Prícipe Felipe y la reina Sofía, este año se suma la del rey Juan Carlos, realizado enteramente en chocolate, con un peso de 450 kilos, formando así el salón de personalidades.

Los atractivos en Galleros Artesanos se completan con las réplicas, también en chocolate, de la aldea almonteña del Rocío (Huelva) y del santuario de la Virgen de la Cabeza en Andújar (Jaén) --la Morenita es muy venerada en Rute--, en referencia a las dos grandes romerías que se celebran en Andalucía.