El proyecto sacado a licitación es fruto de una investigación previa llevada a cabo por Endesa en colaboración con la Agencia Andaluza del Agua y es el más respetuoso con el medio ambiente de cuantos se barajaron en su momento.

La propuesta, que plantea un sistema de limpieza novedoso, consiste en procedimiento de disolución de los lodos que afectan al centro del cauce para permitir el flujo normal de la corriente.

En concreto, según señaló Luis Rey, por medio de una especie de campana se consigue dirigir los caudales del río Genil por la margen derecha del cauce dentro del embalse y conseguir así que el agua circule por la margen donde se encuentran situadas las tomas afectadas por los depósitos de lodo mediante una técnica de emisión de ondas. Esta técnica ya ha sido probada, apuntó el delegado, con éxito, ya que se logró la apertura de un canal.

El embalse del Cordobilla fue construido en 1952 y en los últimos años ha sufrido una colmatación progresiva debido en gran parte a los cambios de uso de suelo, sobre todo al aumento del olivar, lo que ha hecho que el embalse pierda su capacidad útil y ha afectado a la toma de agua tanto de la zona regable como de la central hidroeléctrica, ubicadas ambas en la margen derecha de la presa. Esos problemas han hecho que se acometieran soluciones de emergencia como el recrecido parcial del labio fijo de los aliviaderos laterales para elevar la lámina de agua.