El ex marido de Angeles Zurera, la mujer de 42 años que hace tres desapareció sin que hasta el momento se conozca su paradero, declarará como imputado el próximo viernes en el marco de las diligencias previas abiertas por la desaparición de la mujer, según informaron ayer fuentes cercanas al caso.
La declaración de Manuel Reina, que tendrá lugar en el juzgado de Aguilar, se produce después de que en las últimas fechas se hayan practicado nuevas diligencias por parte de la Guardia Civil y se hayan recabado testimonios en sede judicial de varias personas, entre ellos los hijos de Angeles, explicaron las mismas fuentes. Estas últimas gestiones, añadieron, podrían aportar "datos importantes" a la instrucción.
El ex marido, citado con una "imputación general, sin concretar", explicaron las fuentes consultadas, será la primera vez que declare en el juzgado en los tres años en los que llevan abiertas las diligencias por la desaparición, aseguraron a este periódico. Es más, a estas alturas, es el único que lo hará en calidad de imputado.
El caso ha recibido un impulso en los últimos meses, en los que ha coincidido la llegada de una nueva titular al juzgado de Aguilar y la última manifestación de la plataforma y la familia, arropadas por dos mil personas, para pedir a la Justicia más recursos y un nuevo esfuerzo para concluir la investigación. "Pedimos, una vez más, la comprensión de jueces y fiscales, porque lo que para ellos son solo unas diligencias previas o un montón de papeles, para la familia es la única forma de rehacer su vida y poder acabar con este duelo sin sentido", se leyó el pasado 2 de marzo en la manifestación al cumplirse tres años sin noticias de Angeles Zurera.
En esa misma fecha del 2008, de madrugada, Angeles Zurera se subió en el coche de alguien, dejándose las bolsas de la compra, la cartera, el móvil, las gafas y otros objetos personales en el sofá y la mesa del salón. Después, nunca más se supo.
Durante el primer año se buscó intensamente a Angeles Zurera, encontrando muchos indicios, pero ninguna prueba decisiva. Unos 600 vecinos buscaron su cuerpo durante varios días sin encontrarlo. En varias ocasiones se utilizaron georradares y perros adiestrados en la localización de cadáveres. Varias máquinas excavadoras levantaron, por orden judicial, el vertedero en el que el ex marido de Angeles solía vaciar los escombros. La familia llegó, incluso, a ofrecer una recompensa a quien ofreciera una pista que permitiera su localización. En estos tres años, se han repartido casi 60.000 carteles con su foto, se ha creado un blog y se han organizado múltiples concentraciones.
