Los responsables de la comunidad de regantes de Montilla se muestran convencidos de que la inversión realizada por los socios comunados va a posibilitar un incremento de la producción y una garantía para los años de sequía.
Los agricultores afirman que los cambios son cíclicos y que la sequía volverá a amenazar los cultivos. Con la puesta en riego de las 600 hectáreas, de las que el 65% corresponde a olivares y el resto a viñedo, se va a "devolver el optimismo a tantos agricultores que se han planteado abandonar la actividad". En este momento, afirmó Manuel Márquez, "no hay otra inversión agraria que pueda ser tan rentable como esta y en tan corto periodo de tiempo". Agregó, refiriéndose a ayer, que "hoy es un día histórico para Montilla. Se abre un nuevo periodo en la agricultura de esta localidad". La organización ha dejado las puertas abiertas a los agricultores con propiedades en la zona próxima al área de influencia del plan.