El precio de venta de las fincas agrarias cayó durante el pasado año por primera vez desde el 2000, aunque lo hizo de manera suave. Los mayores efectos de la crisis se dejaron notar en el arrendamiento de explotaciones, que sufrió una importante disminución en los cánones pagados. Un informe de la Consejería de Agricultura al que ha tenido acceso este periódico refleja que, salvo en el viñedo, que incrementó un 2,26% el valor más frecuente de las operaciones, en el resto de aprovechamientos hay descensos que no llegan al 1% pero que constatan que existe un escaso interés en invertir en las fincas ante la poca demanda que existe en la adquisición de tierras. El ejemplo más claro lo resalta la Junta al asegurar que los corredores reciben el encargo de venta de una finca rústica por parte del propietario, cuando lo que ocurría en años anteriores era que el comprador iniciara la transacción. Pese a esto, el delegado provincial de Agricultura, Francisco Zurera, afirma que la inversión en tierras "sigue siendo un valor seguro". "Hay que tener en cuenta --añade-- que el crédito está cerrado y que inversores tradicionales que estaban comprando han desaparecido por la crisis".

En el caso de los arrendamientos, salvo el viñedo, Agricultura observa un clara tendencia a la baja. En el olivar, la disminución llega al 13,28% al establecer un canon medio de 320 euros. No obstante, hay que tener en cuenta que el arrendamiento pagado depende de la cosecha obtenida, que se redujo en el pasado ejercicio. El cultivo por el que se paga más es el ajo en regadío, por el que se abona 891 euros por hectárea (--1,98%), seguido de la tierra de labor en regadío (607 euros, --6,9%). En valores relativos, los mayores descensos se registraron en las fincas de labor de secano, que bajaron un 15,06% (141 euros), y en el pastizal de secano (271 euros, --19,51%). Tras el fuerte incremento que se produjo en el año 2007 en la venta de fincas, el 2008 se contuvo el incremento, aunque el aumento fue mayor que en el resto de Andalucía. En su análisis la Junta ha tenido en cuenta las informaciones facilitadas por los intermediarios.