Los expertos participantes en el Foro IESA de la Cohesión Territorial han concluido en un documento que no hay futuro para las áreas rurales sin una agricultura capaz de combinar la eficiencia productiva, la seguridad en el consumo de alimentos y la sostenibilidad ambiental. De las conclusiones del documento Del desarrollo rural al desarrollo territorial. Reflexiones a partir de la experiencia española se desprende que estas zonas tampoco tienen futuro sin un tejido social "bien cohesionado y en estrecha interacción" con el territorio circundante, una economía dinámica y diversificada, una adecuada dotación en infraestructuras y equipamientos y un sistema político local legitimado por su credibilidad y transparencia.
Según los expertos, el futuro de las áreas urbanas depende también de que haya territorios rurales "vivos y abiertos" a los intercambios sociales y económicos, con capacidad para actuar de soporte de "muchas actividades productivas" y para ofrecer buenas condiciones de vida a la población que opte por residir en ellos.
El Foro de Cohesión Territorial entiende también que la cohesión social y económica entre los territorios debe incardinarse a través de una Agencia Estatal de Desarrollo Territorial y disponer de un fondo propio "con mejor dotación económica que la que se le asigna en el actual Feader". El documento establece asimismo que la Ley de Desarrollo Sostenible del Medio Rural puede verse como un instrumento con potencial suficiente para impulsar en las áreas rurales la aplicación de una política de cohesión territorial que respete la singularidad de cada territorio y que apueste por su adecuada vertebración con el espacio próximo. No obstante, según los expertos, el éxito de esta ley dependerá de que se haga "una firme apuesta" por la innovación para la gestión de los territorios.
