Han pasado ya cinco días desde que la tierra temblara en Haití y también cinco días desde que la misionera pozoalbense Lali Nieto comunicara a su hermana que estaba viva y que estaba bien, pero desde ese primer y único contacto telefónico no hay nuevas noticias acerca del paradero de esta religiosa perteneciente a la orden de las misioneras del Espíritu Santo y natural de Pozoblanco.

Los familiares de Lali mantienen la tranquilidad de ese breve contacto telefónico en el que le confirmaba a su hermana, que la llamó desde España, que se encontraba bien y en el que pedía que estuviera tranquila su madre y el resto de sus familiares. Sin embargo, aún no han podido contactar de nuevo con ella y tampoco han recibido noticias del Ministerio de Asuntos Exteriores acerca de su localización este fin de semana, si bien el viernes un funcionario sí se puso en contacto con la familia.

En casa de Montserrat Cabrera, la madre de la religiosa --que reside en Madrid--, no dejan de marcar su teléfono en Haití, pero de momento no hay línea telefónica disponible.

El hermano de la misionera, José Luis Nieto, ha señalado a Diario CORDOBA que han estado pendientes durante todo el fin de semana del teléfono pero esa comunicación con su hermana no ha sido posible y ha manifestado que tenían la esperanza de que al menos, si no lo podía hacer con sus propios medios porque no tuvieran electricidad para cargar el móvil o no hubiera líneas telefónicas en funcionamiento, hubiera pedido a algún cooperante español con el que se hubiera encontrado que trasladara a la familia que estaba bien.

A esta falta de noticias se une el hecho de que desde el Ministerio de Asuntos Exteriores se remitía ayer a un número de emergencia consular en Haití con el que por la tarde, hora española, era imposible establecer comunicación.

Los familiares de la misionera han señalado que es una persona muy querida en el país caribeño, en el que lleva diez años residiendo, e incluso es la hermana superiora de su orden en La Martinica. Asimismo, han recordado que hace dos años la reina Sofía visitó Haití y Lali fue invitada a la recepción oficial, ya que en su ciudad de residencia, Jacqmel, se lleva a cabo un proyecto de cooperación española relacionado con la pesca.

Lali Nieto tiene 54 años y lleva 25 años como misionera. Pese a que Jacqmel dista más de cien kilómetros de la capital, el día del terremoto estaba en Puerto Príncipe "ya que había ido a recoger a otra religiosa procedente de La Martinica y allí se encontró con la tragedia", relata su madre.