El Arco de Santa Clara, una construcción del siglo XVI que comunica el Palacio de Medinaceli con el monasterio del mismo nombre, ha sido restaurado gracias a un convenio entre el ayuntamiento y la Consejería de Turismo a través del cual se ha financiado la inversión de casi 200.000 euros que ha requerido la ejecución del proyecto.

Un estudio técnico previo a las actuaciones había advertido del mal estado de la edificación "tanto por su condición estructural como por el envejecimiento de las vigas de madera afectadas por el ataque de xilófagos".

El aspecto del arco y de las edificaciones superiores, en avanzado estado de deterioro, ha mejorado notablemente al suprimir las capas de cal y otros materiales y recuperar la piedra arenisca que lo vincula con el resto de elementos arquitectónicos del entorno.

El arco ha sido abierto a los peatones y vehículos al haber concluido las obras para la consolidación del inmueble, que se han dirigido "al desmontaje de las carpinterías de madera, los canalones, el faldón de la cubierta de teja y el propio cerramiento de la galería volada".

Las actuaciones han sido realizadas por la empresa montillana Doria Ecsa. Además, se ha procedido a la limpieza de toda la suciedad acumulada en el compás y a la supresión del cableado de alumbrado público, suministro eléctrico en baja tensión y telefonía. La alcaldesa, Rosa Lucía Polonio, mostró ayer su satisfacción "porque Montilla haya podido recuperar para siempre uno de elementos patrimoniales más característicos".

Este histórico arco construido para facilitar el acceso a una tribuna elevada de la iglesia del monasterio de Santa Clara desde el Palacio de Medinaceli se encontraba en un estado muy avanzado de deterioro como consecuencia del intenso tráfico que venía soportando y de los problemas de erosión ocasionados principalmente por el exceso de humedad.

SIN CABLES A partir de ahora, según fuentes municipales, el arco no volverá a soportar el cableado ya que se han realizado unas canalizaciones subterráneas para soterrarlo, y se han subsanado las dificultades creadas por el exceso de humedad.

En este mismo sentido, el Consistorio montillano ha decidido reducir el tráfico que circulaba bajo el arco desde el Llano de Palacio hasta la calle Benedicto XIII y Pozo Dulce, en ambos sentidos. Ahora, solo se podrá circular en un único sentido hacia la calle Benedicto XIII y, además, se prohibirá el paso de vehículos que tengan una anchura máxima superior a 2,15 metros.