El delegado de Agricultura, Francisco Zurera, dijo ayer que "en las próximas horas" habría que encontrar una solución al abandono de un rebaño de ovejas en Villaralto, y esa solución llegará hoy mismo, ya que se ha ordenado que comience la retirada de las más de 200 ovejas muertas. Será la primera medida para resolver una situación que viene incomodando a los vecinos desde hace ya semanas. Mientras, sigue sin localizarse al dueño de los animales, al que, según anunció ayer Zurera, se va a abrir un expediente sancionador.

Fuentes de la Consejería informaron a este periódico de que será la empresa Trasega la que se encargue de la retirada de los animales muertos y, de forma paralela, se proporcionará alimento a los que aún sobreviven a través de la Oficina Comarcal Agraria de Hinojosa del Duque y de los técnicos de la empresa pública Desarrollo Agrario y Pesquero (DAP) mientras se resuelve el conflicto. Hoy mismo los veterinarios comenzarán el "saneamiento" de las ovejas vivas, que consiste en realizar las pruebas pertinentes que determinen el estado de salud real de los animales que aún viven.

Zurera aseguró en rueda de prensa que la Junta ya está procediendo a recuperar al resto del rebaño que aún se encuentra descarriado y se mantiene a la espera de que el propietario aparezca para tomar las medidas oportunas. En cualquier caso, dijo que éste "no es un ganadero", ya que "no ha actuado como debería ni ha avisado del abandono o de la situación de su rebaño".

El delegado, que se mostró preocupado por la situación del rebaño, consideró que se trata de "una situación extrema en la que hay que actuar en el sentido del bienestar animal".

El pastor llegó a la comarca hace dos años con alrededor de 700 ovejas procedente de Castilla la Mancha y fue recorriendo con el ganado los términos de El Viso, Villanueva del Duque, Alcaracejos, Hinojosa del Duque y Villaralto, donde actualmente se encuentra el rebaño, ya bastante mermado por las condiciones en las que lo tiene su propietario. Este no dispone de medios económicos suficientes para hacer frente al coste del arrendamiento de una parcela --lo que sí hacía al principio-- ni a la adquisición de comida para los animales.

Mientras tanto, los vecinos de Villaralto continúan con la recogida de firmas que iniciaron hace días por todo el pueblo para que las autoridades resuelvan la situación.