El hurón, la tercera mascota más común en Estados Unidos tras el perro y el gato, se ha convertido en uno de los mejores aliados para frenar la superpoblación de conejos en la Campiña cordobesa. Para esto, los dos equipos especializados en la captura de los lagomorfos introducen los hurones en las madrigueras de los conejos para cogerlos vivos con redes. Desde que la Delegación Provincial de Medio Ambiente comenzara en noviembre a utilizar este sistema para controlar la superpoblación ha conseguido trasladar más de 1.700 ejemplares a las zonas en las que se llevan a cabo programas de recuperación del lince ibérico, buitre negro y águila imperial de Córdoba.

Entre las zonas de actuación se encuentra la autovía A-45, que se ha convertido desde mediados de enero en uno de los lugares prioritarios de intervención. La Junta ha recogido en este periodo 531 adultos reproductores.

Otro de los parajes de intervención es la laguna de Zóñar, zona en la que la Junta volverá a utilizar hurones la próxima semana.